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mejores instalaciones

El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, mostró la nueva cara del puerto deportivo de Marina da Gloria, que albergará las pruebas de vela durante los Juegos Olímpicos de agosto próximo en esta ciudad brasileña.

Tras unas prolongadas obras, esta área, continuación del conocido Parque de Flamengo, contará ahora con más plazas para barcos tanto dentro, como fuera del agua, mejores redes de alcantarillado y electricidad, un techo con protección acústica y térmica (en sustitución de una antigua carpa que cubría el Pabellón) y una nueva zona de restauración.

La renovación de la zona, calificada de “éxito” por el alcalde y el también presente ministro de Deportes de Brasil, Ricardo Leyser, facilitará el acceso a los que quieran pasear por el puerto deportivo, que antes tenía restringidas algunas áreas a los dueños de los barcos.

“Estamos resolviendo un problema que en la práctica surgió desde la creación del Parque de Flamengo. O sea, hace cincuenta años. Este puerto, desde que fue creado el Parque de Flamengo, de hecho nunca llegó a ser un puerto deportivo público”, explicó Paes.

El presidente de la Confederación Brasileña de Vela, Marco Aurelio Sa Ribeiro, también satisfecho con el resultado, llegó a asegurar que las competencias, previstas para dentro de unos cuatro meses, “ya podrían ser mañana”.

“Creo que es un motivo de orgullo, porque nuestro país pasa por una serie de dificultades económicas y políticas e incluso así cumplimos con el compromiso con la comunidad deportiva mundial de entregar un evento de excelente nive”, sentenció.

La renovación, que recibió una inversión totalmente privada de 70 millones de reales (unos 18. 91 millones de dólares), estuvo motivada inicialmente por la necesidad de mejorar las instalaciones de cara a los Juegos.

La Marina de Gloria da acceso directo a la bahía de Guanabara, en la que se disputarán las competencia de vela y cuya contaminación se ha convertido en polémica para los Olímpicos de Río.

Pero si las autoridades no consiguen cumplir su compromiso de descontaminar la bahía de Guanabara, es algo que no preocupa al alcalde.