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Baldetti guardó sobornos en efectivo en Casa Presidencial

Luego de que el juez Miguel Ángel Gálvez, del Juzgado B de Mayor Riesgo, suspendió la indagatoria en el caso Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ), ayer se filtraron en Internet audios de la declaración del colaborador eficaz Juan Carlos Monzón, exsecretario privado de la exvicepresidenta Roxana Baldetti, quien detalla cómo se fraguó y se pagaron los sobornos por la autorización de la ampliación de la terminal portuaria.

Monzón explicó ante el juez Gálvez la forma en que se recibieron los pagos: “Ese dinero llegó a la Casa Presidencial. Le solicité a mi asistente, la licenciada Ismenia, que fuera a recibir a (Jonathan) Chévez  (alias el Mago) a la puerta del callejón Manchén. En la puerta de ingreso de la Presidencia me llevó el dinero en unas bolsas selladas. Lo metí a mi despacho en un espacio especial que tenía”.

El exsecretario explicó que después de avisarle a Baldetti que el dinero ya se encontraba en la Casa Presidencial le dijo: “Anda, mételo donde ya sabes”, y se fue a su despacho, donde, atrás de su escritorio, tenía un walk in closet y baño, donde guardaba el dinero. “Ahí lo metí, incluso le tomé una foto y se la envié y me respondió, perfecto, ahí déjalo, yo se lo entrego al presidente”, indicó.

En su declaración recordó que cuando Baldetti vio el dinero se molestó con Chévez y con Monzón, debido a que solo había billetes de $20, y en tono alterado le dijo: “Cómo es posible que los tenga en $20”.

La declaración de Monzón se dio durante cuatro horas y media, a puerta cerrada, el 12 de abril, en la que describe detalladamente las órdenes que le dio la “jefa”.

En el audio, el exsecretario de Baldetti reveló cómo se nombró a Allan Marroquín como interventor de la Portuaria Quetzal, quien ya tenía conocimiento para empezar las negociaciones con la empresa Terminal de Contenedores Barcelona.

“Le di los informes a la vicepresidenta de cómo me había ido; le di las comisiones, quiénes estaban involucrados. Tajante, señor juez, tajante, me indicó, primero no me menciones a César Medina; no me menciones al enano, me dijo. Yo no sé quiénes son los argentinos, y a Gustavo Martínez lo sacas de esto”, lo cual pondría en evidencia que Baldetti era quien decidía cómo se manejaría el contrato y quiénes serían los beneficiados.

Asimismo, Monzón dijo conocer al magistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) Douglas Charchal, porque este solicitó su ayuda y la de la exvicepresidenta Baldetti para llegar a ocupar una magistratura en la CSJ, petición a la que accedieron, con respaldo de un grupo conocido como Los Fuchos.

REPARTO DE DINERO 

Monzón testificó que Pérez Molina y Baldetti recibieron $3.5 millones (Q26.2 millones) cada uno.

“Sin qué ni para qué, señor juez, esa cuenta rápido llegó a cero”, dijo Monzón, en referencia a la cuenta de Baldetti, que quedó sin fondos por haber comprado joyas y un terreno que está ubicado a la par de la propiedad de Pérez Molina, en las playas de Monterrico.

Según el colaborador eficaz, el expresidente Pérez Molina “fue más cuidadoso con el gasto”, ya que compró un yate nuevo en lugar del que ya tenía; adquirió equipo de pesca y la compra de otros bienes.

Piden renuncia

De magistrado Douglas Charchal

Según el Ministerio Público, Juan Carlos Monzón Rojas convenció al ahora magistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Douglas Charchal Ramos, y al secretario y oficial del Juzgado de Escuintla para que se otorgara un amparo a favor de TCQ y con ello facilitar el negocio de ampliación del Puerto Quetzal.

Debido a ese señalamiento, el Centro para la Defensa de la Constitución (Cedecón) pidió ayer que el magistrado Charchal Ramos renuncie a la alta investidura que ocupa en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) para garantizar el desarrollo de las investigaciones.

La entidad solicita que Charchal se presente a los tribunales a resolver su situación jurídica, ante la gravedad de las acusaciones formuladas en su contra por el caso TCQ.  Además de que su permanencia en el cargo afecta seriamente la confiabilidad y la misma institucionalidad de la que debe gozar la CSJ.

Denuncia penal de la PGN

Contra 13 exministros

En una citación por la bancada Movimiento Reformador, la titular de la Procuraduría General de la Nación (PGN), María Eugenia Villagrán, dio a conocer que presentará una denuncia penal contra 13 exministros del gobierno de Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti, así como contra el ex secretario presidencial, Gustavo Martínez, quienes habrían firmado el acuerdo gubernativo para darle respaldo al negocio millonario con la empresa Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ). También dijo que solicitará al presidente Jimmy Morales que le delegue la facultad para decretar lesivo el contrato.

Las frases de Monzón

El encargado

“A mí me nombraron para hacerme cargo de la negociación TCQ por orden de la vicepresidenta (Roxana Baldetti), señor juez”.

El contacto

“La señora Roxana Baldetti me pide a finales de diciembre de 2012 que me aboque y me apersone con “Chilly Willy”, que es el indicativo del señor Guillermo Lozano, para enterarme del usufructo”.

“A Guillermo ya lo conocía, específicamente porque lo vi piloteando y llevando al señor presidente y la señora vicepresidenta en tiempos de campaña. Era colaborador de viajes en helicóptero en los puntos de destino del país”.

La repartición

“Baldetti me dijo que la comisión era de 30 millones. Pensé que eran quetzales y me sorprendí al enterarme de que eran dólares”.

“Yo recuerdo exactamente cuánto fue que se asignó a Otto Pérez…, a Baldetti…, $3.5 millones cada uno, y a mí el resto, se dividió entre los de abajo que eran Allan (Marroquín), Bill (William Schwank) y Julio (Sandoval)”.

“Reconozco, señor juez, que se hicieron dos pagos, uno por $10 millones y el otro por $2 millones, el tercero desconozco si se pagó”.

“De los  $9 millones 500 mil, menos 1 millón 200 mil, si no estoy mal, que cobró Chévez, se repartieron $3 millones y medio para Otto Pérez, $3millones y medio para Roxana. A mí se me estregó la cantidad de $260 mil (dólares)”.

El competente

“Sé decirle, señor juez, que no solo tuve conocimiento, sino que ese usufructo oneroso, si se llegó a realizar fue por mí. Hice que ese contrato oneroso se llevara a cabo”.

Los sobornos

“La señora vicepresidena me dijo: No les pongás españoles (en la lista de sobornos), muy evidente, poneles coches 1, porque no se bañan, siempre apestan”.

“Baldetti me dijo que de la negociación, los $24.5 millones del soborno para los ‘socios locales’ tenían que pagarlos antes de salir del gobierno, si no ya no les mirás el cacho”.

La guarida

“En la oficina de Baldetti (en la Casa Presidencial), atrás de su escritorio, había un walk in closet y baño. Allí se guardaba el dinero”.