Es necesario dar todo el apoyo a migrantes
No se puede negar que la economía nacional está sustentada en gran parte por los connacionales que han emigrado hacia Estados Unidos. Las previsiones del Banco de Guatemala indican que al final del año superarán los $1,400 millones. Hasta julio el monto del dinero enviado fue un poco mayor a los $4 mil millones.
Guatemala figura entre los primeros lugares de países desde donde proceden migrantes en busca del sueño americano, y lamentablemente sobresale en las estadísticas de abusos contra personas que atraviesan el territorio mexicano.
Los registros indican que en el año 2001, el millón y medio de compatriotas que trabajan en EE. UU. remitieron al país $584 millones, mientras que para este año, ante la crisis económica agobiante y el desempleo, la previsión es que esa suma casi se triplique.
Es evidente que las divisas que generan los connacionales están muy por encima de cualquiera de las otras actividades productivas del país, y dan idea de la situación precaria por la que atraviesan millones de guatemaltecos que viven en una situación de subsistencia en un país donde siempre se dice que es privilegiado y rico en recursos naturales.
Son muchas las historias sobre los riesgos y finales trágicos acerca de los sacrificios que se atreven a enfrentar los conciudadanos, quienes al emprender el viaje se exponen a un sinfín de vicisitudes que algunas veces terminan en su muerte, mientras que en el vecino país del Norte son discriminados, realizan los peores trabajos, sufren maltrato psicológico y hasta físico, son mal pagados y viven bajo el acoso persistente de las autoridades migratorias o de la Policía.
En la actualidad son tiempos particularmente difíciles para estos héroes anónimos, porque el tema de los migrantes es parte de los discursos políticos de la campaña presidencial entre republicanos y demócratas, cuyos presidenciables los ven nada más como un voto potencial, más que sujetos de políticas que realmente los beneficien.
Los migrantes en el presente siglo han tenido que enfrentar situaciones difíciles. Bajo el pretexto de la seguridad por los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 se endureció la postura contra los inmigrantes centroamericanos, quienes, se debe tener claro, no son delincuentes, sino seres humanos con necesidades e ilusiones como cualquiera otra persona.
La valentía y el sacrificio de los connacionales que viajan en busca de oportunidades es algo que se debe tener en cuenta, para que desde el Ministerio de Relaciones Exteriores y los consulados se les dé todo el apoyo, pues las remesas son un aporte valioso para sostener la economía familiar y el desarrollo del país.