Una historia cubana
Cuando la Cuba de Fidel se declara abiertamente marxista, lo hace hasta en 1962. afirmó Fidel, que Cuba tendría… ´un programa marxista-leninista ajustado a las condiciones objetivas exactas de nuestro país´ (citado por TadSzulc enFidel: a criticalportrait, pg. 568). EE. UU. Buscó entonces acelerar la expulsión invocando el artículo 6º del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca que en suma afirma la necesidad de considerar“las amenazas a la paz y a la independencia política de los Estados americanos que puedan surgir de la intervención de potencias extracontinentales encaminadas a quebrantar la solidaridad americana”. Para evitar la expulsión, fue la delegación mexicana, dirigida por el embajador Tello, quien planteó entonces la tesis de la incompatibilidad: …existe una incompatibilidad radical entre la pertenencia a la Organización de los Estados Americanos y una profesión política marxista-leninista, como lo sería también con una profesión monárquica absoluta.
La cuestión no era la esencia, sino la forma: buscar que Cuba aceptara la tesis de la incompatibilidad para que saliera voluntariamente de la OEA evitando la inevitable expulsión. Lo cual sucedió. Al momento de la votación, solo 4 países votaron en contra de expulsar a Cuba (México entre ellos). De ahí hacia adelante, México articularía una relación muy particular con el régimen de Castro.
Pero en la práctica, el México priista y el régimen de Castro tuvieron momentos de tensión. Casi nadie recuerda el secuestro en 1972 de vuelo 705 de Mexicana de Aviación. El vuelo que se originaba en Ciudad de Monterrey fue secuestrado por un grupo de guerrilleros miembros de Liga de Comunistas Armados (un grupo mexicano de extrema izquierda). Los secuestradores pidieron asilo en Cuba. Cuba lo otorgó, el Gobierno mexicano concedió las demandas y todo terminó. Pero México y Cuba tensaron las relaciones comerciales, reduciendo el Gobierno mexicano su ayuda al régimen. ¿Cómo lograba México esa relación con Cuba frente a EE. UU.? Porque México tampoco hacía mucho para impedir las acciones estadounidenses. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que México nunca rompió relaciones con la isla. Cuba articulaba su anti-americanismo, al cual México se adhería pudiendo reafirmar su independencia frente a Estados Unidos (lo que era simbólico, pero no real). Al mismo tiempo, México evitaba que el castrismo impulsara grupos insurgentes en territorio mexicano (al menos así se creía). Y EE. UU, encontraba en México un interlocutor con la isla.
Una contención muy interesante que se haría tensa. En 1988 el gobierno de Castro criticó el acercamiento de México a EE. UU. diciendo…´ los niños mexicanos reconocían más a Mickey Mouse que a los héroes nacionales. ´ Hay que recordar que eran los años previos a la firma de NAFTA. Sería hasta la administración de Fox, donde las cosas se pondrían feas. Difícil olvidar el famoso comes y te vas. Vicente Fox no imaginaba que la inteligencia cubana grabaría su charla con Fidel pidiéndole que para no ofender al expresidente Bush Jr, no estuviese presente en la comida de gala de laConferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo que se realizaba en Monterrey. Lo que pasa es que Bush Jr. había dicho que no quería estar en el mismo cuarto junto a Fidel.
Luego de eso, vendría la condena por parte de México a Cuba en materia de Derechos Humanos en el 2002 rompiendo con la tradición priísta de no intervenir en asuntos soberanos de otros Estados. En 2004 rompieron relaciones. El ex canciller mexicano Jorge Castañeda afirmó: «se acabó la relación con la revolución cubana y se inician las relaciones con la República de Cuba». Aspecto que aún sigue en una maniquea discusión.