Columnas

¿Por qué los salarios mínimos?

Por: Byron S. Morales Dardón

El 30 de diciembre se publicó en el Diario Oficial la tabla de salarios mínimos para el año 2017. Para las actividades agrícolas y no agrícolas quedó establecido por día Q86.90 y para la actividad de exportación y maquila Q79.48. Agregada la bonificación incentivo que es de Q250, los salarios mensuales son de Q2,893.21 y Q2,667.52, respectivamente. El reajuste se corresponde con la tasa general de inflación, pero no cubre la canasta básica de alimentos que, según el INE, en noviembre 2016 llegaba casi a los Q4 mil. Esto hace impagables otros gastos familiares como servicios de luz y agua, calzado, vestido, útiles escolares y otros que cuestan poco más de Q7 mil mensuales.

Los pronunciamientos han sido en contra del reajuste en unos, debido a la insuficiencia aludida. En otros, al tratarse de una variación de costos laborales que ven como carga para las empresas en momentos de incertidumbre económica, principalmente por el cambio de gobierno estadounidense. Se aduce también que ese reajuste es una decisión eminentemente política y no sobre la base de criterios técnicos, en alusión a la incapacidad de acuerdo en la Comisión Nacional del Salario y dejarle la decisión al Presidente.

«Se aduce también que ese reajuste es una decisión eminentemente política .»

Hay mucho que decir al respecto, pero hay que empezar por cuestiones básicas. Cuando se habla de salario, se está haciendo referencia al pago que recibe una persona que trabaja, como consecuencia de una relación con un patrono o una empresa, derivada de un contrato escrito o verbal, por un trabajo o servicio que haya prestado o vaya a prestar. Así mismo, la idea de salario mínimo está basada en las condiciones de existencia dignas para la persona trabajadora y su familia, lo que conlleva una estrecha relación con el hecho que el ingreso sea suficiente para lo básico de la vida de una persona y sus responsabilidades familiares.

De esa cuenta, la legislación pretende limitar las pretensiones de patronos de hacer un pago salarial menor a quienes realizan algún trabajo o servicio, pues tiene implicaciones en el desarrollo de las personas, sus familias, la economía, su comunidad y el país. De esa manera, el propósito es proteger a la parte más vulnerable de la relación laboral. Es el motivo por el cual los salarios mínimos están garantizados por la ley y no pueden disminuirse bajo ninguna circunstancia o acuerdo individual o colectivo, aunque en la vida real la situación es diferente. El salario mínimo se constituye en salario máximo.

Eso se deriva de que los salarios en una empresa son parte de los costos de producción y por lo general, es la única variable sobre la que puede influirse, lo que no sucede con la tecnología, la energía eléctrica, las materias primas y otros. Pero constituyen igualmente factor de gasto general de consumo, por lo que la política de salarios mínimos es instrumento de política macroeconómica y al mismo tiempo, de protección social. Los salarios mínimos son herramienta clave para la estrategia de desarrollo económico.