Jimmy y el alto juego de la política
Por: Roberto López Porras
No cabe duda que Jimmy todavía conserva un pequeño capital político de quienes creen que su Gobierno puede recuperar la confianza, pero no puede negarse que su gobierno carece de liderazgos en los puntos críticos de acción. Escasos dos o tres Ministros pragmáticos que con su conocimiento, trabajo y su visión, dan una perspectiva optimista a pesar de los nubarrones que tiene Guatemala para el año 2017 y más allá.
Si Jimmy tuviera un Partido popular, sin un pasado dudoso, un Plan de Gobierno viable y una vision futurológica de la Guatemala que todos queremos alcanzar, podría enderezar su gestión y convertirla en un éxito durante los próximos tres años pendientes de gestión. Quizá sea mucho pedir. Si hay cambios positivos en el 2017, no vendrán del Ejecutivo, ni de sus Ministros que duermen , sino de los otros dos Poderes publicos que con sus acciones están cambiando el esquema de inercia que vivimos desde hace muchos años.
«Si Jimmy tuviera un partido popular, sin un pasado dudoso, un plan gobierno viable y una visión futurológica de la Guatemala.»
La caminata festiva de Jimmy y sus Ministros desde el Palacio Nacional al Congreso de la República, diez cuadras al sur, que los periodistas aprovecharon infructuosamente, para hacerle preguntas al vuelo, le sirvió para imaginarse el ambiente de espectación, quizá hostil que le esperaba en el Congreso, pero su mensaje a la Nación que llevaba en la bolsa, no contenía ni buenas ni malas noticias, el mismo era un discurso narrativo de los obstáculos que lo rodearon cuando tomó posición y de su deseo de resolver los problemas acuciantes acumulados, siempre pendientes.
Tener que oir al Presidente saliente del Congreso, Mario Taracena, con su afilada retórica y reproches a la pasividad o lentitud del ejecutivo y la falta de apoyo a las reformas polìticas en el Congreso, podian ser una pesadilla y como Jimmy no es político, ni ha absorbido la cultura del cambio en el que está inserto sin quererlo, resolvió no entrar al hemiciclo legislativo, sino esperar a que el Presidente saliente de la Cámara, Mario Taracena terminara su discurso.
La sesión solemne que solo se da una vez al año por mandato Constitucional, no podia empezar por la ausencia del Presidente Morales, y Mario con su espíritu inquieto , después de una hora de espera, abrió la sesión sin la presencia del Presidente Morales, Jimmy estaba afuera del hemicicio, asi cuando entró, la Sesion Solemne se interrumpió de acuerdo con el Protocolo. El desaire no fue contra Mario Taracena sino para el Congreso, para toda el Cuerpo Diplomático, Jerarcas de otros Poderes, personalidades y público invitado que esperaban impacientes.
Era la respuesta de Jimmy a Mario por sus expresiones despectivas al Presidente Morales. Era la expresión de un divorcio politico, asi lo entendimos en Main Street, los que observamos desde la barrera, un pleito de dimes y diretes polìticos entre dos de los tres jerarcas de los Poderes Públicos. Mario Taracena y los diputados de su Partido UNE -Union Nacional de la Esperanza- respondieron con un contra golpe improvisado, al ausentarse del Hemiciclo para no escuchar el Informe del Presidente Morales, que había sido calificado anticipadamente por Mario Taracena como un documento con falta de contenido que podria caber en un Correo Twitter, al cual se refirio Jimmy en su discurso.
El evento terminó con un sabor de frustración de los asistentes y de la ciudadanía, porque los trapos sucios o las rencillas personales deben ser dirimidos en otros escenarios.. La autonomía no significa independencia, sino coordinación para alcanzar los altos fines del Estado y del pueblo. Aqui no habrá Wiki Leaks, porque el espectáculo y sus orígenes todos lo conocen, lo lamentable es que dos altos dignatarios de la Nación lo protagonizaran en un acto solemne ante representativos de la sociedad guatemalteca y de la Comunidad Internacional.