El marco jurídico contenido en la Constitución

Durante años se ha cuestionado el contenido de la Constitución de la República. Se critica que gran cantidad de abogados utilizan muchos de sus postulados para retorcerla. Otros la han catalogado como letra muerta, porque en realidad muchos de los preceptos que están contenidos en ella no se aplican, ni se respetan en el ámbito jurídico y político del país. Este marco jurídico, que abarca el cumplimiento de normas de mejor convivencia social y darle a cada quien lo que merece, en cuanto a la aplicación de la justicia, en muchas ocasiones ha sido cuestionado. Sobresalen los primeros tres artículos constitucionales: Artículo primero, Protección a la persona. Artículo segundo, Deberes del Estado, y Artículo tercero, Derecho a la vida.

Para el constitucionalista Carlos Rafael Rodríguez, nuestro problema no es de leyes sino  de hombres, falta que actores con verdadera y auténtica vocación democrática lleguen a ejercer los cargos públicos en el país. Aduce el constitucionalista que  las leyes nunca van hacer perfectas, porque son obra humana, y tampoco lo es la Constitución, la cual contiene errores y son perfectibles. Rodríguez expone que el país necesita una Corte de Constitucionalidad con magistrados que tengan vocación democrática, para que logren prevalecer los más altos valores de la Constitución, aunque esta pueda tener alguna falencia, pero si lograr cumplirla. A su criterio hay detalles, como la lucha interna que se realiza cada año por la presidencia de la Corte Suprema de Justicia.

Sobre los magistrados de la Corte de Constitucionalidad, indica que manejan la discrecionalidad, pero deben decir por qué se inhiben, no solo la causa, decir “yo tengo interés directo, porque está involucrado mi hermano”, por ejemplo. Pero no porque el cielo está estrellado, porque eso es incumplimiento de deberes, analiza. En cuanto a las leyes que rigen la justicia, el constitucionalista indica que a veces no se entiende el régimen disciplinario, pero este no debe servir de ninguna manera para cuestionar las decisiones de un juez. “Si a usted no le gusta una decisión de un juez impúgnela para eso están los recursos, y si el juzgador fue tan malo y no apegado a derecho, siga el procedimiento y enjuícielo. Esos son los  caminos, lo  penal, lo civil y lo disciplinario”, resalta.

Rodríguez dice que las leyes son humanas, no son perfectas, van atrás de los cambios de la historia, ya sea por los cambios económicos, sociales y políticos. Hay que regular hoy las cosas que no se dieron antes. La Constitución necesita acomodo y sedimentación. Los americanos tienen una Constitución, pueden pervivir con ella, las adaptaciones del texto constitucional deben estar en manos de un tribunal constitucional fuerte, con jueces probos, que resuelvan por causas jurídicas. A la Constitución no debe dársele un tratamiento individual, porque todas las cosas están vinculadas.

Redacción

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