Magistrada Stalling queda en manos de la justicia
Desde el pasado 10 enero, la magistrada Blanca Stalling fue denunciada ante el Ministerio Público (MP) por el juez Carlos Ruano, quien llevaba el caso IGSS-Pisa, donde está sindicado Otto Fernando, hijo de la togada. En esa ocasión, el juez Ruano dijo que Stalling lo invitó a la vocalía VII de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) para hablar del juicio que él llevaba, e indicó que recibió una petición para que el mismo se acelerara y se buscara darle una solución, como una medida sustitutiva para el sindicado.
Posteriormente, la magistrada dio a conocer que los hechos no fueron como los relató el juez y si hubo un acercamiento, fue porque ella le indicó que en la resolución se apegara a Derecho. A partir de allí, el tema de discusión en los diferentes medios de comunicación y reuniones fue la situación de la togada, que incluso empezó a ser cuestionada por algunos de sus colegas que integran la CSJ. Días después, el pleno de la CSJ decidió dar trámite al antejuicio que solicitó el MP y la CICIG, y en una semana este llegó al Congreso. Allí se nombró una Comisión Pesquisidora, que por espacio de cuatro días escuchó a todas las partes. En ese lapso de tiempo, varias organizaciones le solicitaron a Stalling que renunciara para someterse a la justicia, pero no lo hizo y hasta la fecha, a solicitud de ella, fue separada del cargo con goce de sueldo.
Aunque Stalling fue capturada ayer, no perdió su cargo como magistrada y lo perderá cuando un juzgado determine que los medios de prueba que presentó el MP son suficientes para ligarla a proceso y, desde luego, un juicio determinará su destino final. En esta ocasión, la magistrada Stalling enfrentará a la justicia, como ya lo hicieron las juezas Jiselle Reinoso y Marta Sierra de Stalling. El mensaje que han dado las autoridades con estos procesos es que nadie es superior a la justicia, aún siendo parte de ella, aunque desde luego persiste la presunción de inocencia, hasta que no se determine lo contrario.
La captura de la magistrada Stalling provocó un alboroto en Tribunales, e incluso hizo que se suspendiera la audiencia por el caso La Línea, donde está involucrado el exbinomio presidencial, así como exintendentes de la SAT y de Aduanas. Al final, con la aprehensión de la togada Stalling, termina la incertidumbre de que se giraría una orden de captura o que ella podría tener poder en la CSJ para detener las sindicaciones que se le hicieron. El mensaje al final puede quedar en que la justicia debe ser pareja y no solo aplicarse para quienes no tienen los recursos para defenderse, sino para todos por igual, incluso para quienes en apariencia tienen poder al ocupar altos cargos en las instituciones del Estado.