Familias empresarias
El domingo recién pasado transcribí el mensaje que el Papa Francisco envió a los participantes del I Congreso Latinoamericano de Pastoral Familiar que se realizó el Panamá la primer semana de agosto del año 2014 y hoy comienzo una serie relacionada específicamente con las Familias Empresarias que hemos definido como Núcleo de la Sociedad y Motor de la Economía… los estudios demuestran que las Empresas Familiares, producto del esfuerzo y dedicación de las Familias Empresarias generan más del 70% del Producto Interno del Mundo.
Quiero comenzar mencionando que como un tributo a estas Familias Empresarias, el Grupo Legacy ha creado el programa Productividad en Armonía cuyo propósito es contribuir a que las Empresas Familiares sean bien dirigidas y administradas y, con ello, puedan trascender a través de las distintas generaciones. Este programa, que consta de 8 módulos de 1 día cada uno dará inicio el próximo 15 de mayo en Academics; este día se tratará el tema La Empresa Familiar: Particularidades y Desafíos. Los siguientes 7 módulos serán los días martes 16 de mayo, lunes 19 y martes 20 de junio, lunes 17 y martes 18 de julio y lunes 21 y martes 22 de agosto. Se utilizará una metodología de charlas, casos, actividades vivenciales y, muy importante, análisis y reflexión de experiencias reales.
Las Familias Empresarias tienen el privilegio, y la obligación, de generar utilidades si sirven bien a sus Clientes pero también tienen la obligacinón de crear y transmitir un legado que constituirá el DNA de la Empresa o Empresas Familiares que han fundado y hecho progresar. Por supuesto, el éxito no es una consecuencia automática de tener una Empresa Familiar, el éxito es producto de muchas horas de dedicación y sacrificio y de “tratar y errar”. El éxito, con excepción del diccionario, siempre viene después del trabajo (porque la E está antes que la T) y las Familias Empresarias deben reconocer esta situación. El tema más grandioso de un Fundador o Fundadora es dejar un Legado… no, no es la herencia, es el legado. Y el Legado es producto de tener una Visión unificada, es producto de un gran esfuerzo, es producto de mucha disciplina, es producto de mucho trabajo, es producto de mucho amor. Siempre hemos promovido la idea que los siguientes 3 puntos son cruciales para el buen desarrollo de una Empresa Familiar: (1) Amor, del griego philea entre los miembros de la Familia: respeto a la diversidad. El amor tiende a la comunicación y no al aislamiento. La dignidad de las diferencias. En las familias todos contribuyen al proyecto común pero NO anulan al individuo: lo promueven, lo sostienen. No al ateísmo económico; (2) un sistema formal de Planeación Estratégica. Diálogo es una palabra que crea puentes – se deben propiciar debates frecuentes, sinceros, honestos y serenos. No cultiva el que no cuida y no cuida quien no cultiva y (3) Un profundo conocimiento de la situación financiera de la Empresa desde la temprana edad: si nos va bien tenemos vacaciones, si nos va mal no nos damos regalo navideño. El valor de la austeridad debe ser vivido: promovido y ejemplificado.
La Familias Empresarias son un semillero de valores y virtudes… las Familias Empresarias promueven, con su ejemplo diario, un ejemplo de honestidad. Los miembros de las Familias Empresarias entienden y practican el concepto de “servir” y no el de “ser servido”. Los miembros de las Familias Empresarias entienden que, para cultivar, es importante sembrar y cuidar y no simplemente sembrar y esperar. Los miembros de las Familias Empresarias se “sacrifican” a favor de los Clientes y la Comunidad que sirven. Los miembros de las Familias Empresarias no piden, ni tienen, privilegios sino se comprometen a servir. Los miembros de las Familias Empresarias deben tener y cumplir con reglas preestablecidas que involucren a todos por igual.
Los miembros de las Familias Empresarias están al servicio de sus Clientes…