¡Viva Guatemala!
Por: Alejandro Palmieri Waelti
Guatemala es de nosotros los guatemaltecos ; no importa si nuestra familia tiene orígenes europeos, asiáticos, africanos o de los pueblos originarios del territorio; somos guatemaltecos. Es la única patria que tenemos y debemos sentirnos orgullosos de ella con todo y susrezagos. Algunos chapines son especialistas en criticar a su patria, muchos incluso lucran con la desgracia nacional demandando al Estado o sea, a usted y a mi ante organismos internacionales. Eso me parece despreciable. En contraposición, los colombianos que conozco en lugar de hablar mal de Colombia resaltan las cosas buenas. Siempre me ha dado envidia esa su forma de ser que a pesar de los males se enfocan en lo bueno y en los avances que han tenido. Rezagos y problemas tienen todos los países y no salen adelante fijándose en lo malo solamente.
Independientemente que no estemos conformes con la situación actual de Guatemala, tenemos que construir sobre lo positivo, ponernos de acuerdo con base en los puntos comunes. Mi generación es la penúltima que vivió el conflicto armado y ya estamos hartos de que se siga lucrando con el pasado y con la desgracia. Creo que los que lucran con los males de Guatemala son ingratos. Tenemos un clima envidiable y gente valiosa, campesinos que de sol a sol sacan la tarea para proveer aunque sea modestamente a sus familias. Tenemos empresarios y profesionales de nivel mundial que han salido a conquistar la región y el mundo. Y si, también tenemos políticos y funcionarios públicos honestos y con espíritu de servicio. Tenemos una rica cultura e historia llena de lecciones que debemos aprender y aplicar en nuestra vida diaria, pero en lugar de eso, los medios y las redes sociales están llenas de resentimientos, odios y burlas.
Sé que no es fácil ver lo positivo, pero es un esfuerzo que tenemos que hacer si queremos tener el estado de ánimo y la disposición mental para construir. Nuestra economía es pujante y debemos trabajar en disminuir la desigualdad, pero para ello necesitamos apoyar a quienes construyen, invierten y confían en Guatemala. Se vale señalar los errores de los funcionarios, claro, pero también se debe votar responsablemente si no, no vamos a ningún lado como nación. Haga un examen de conciencia y en su intimidad responda si usted es de los que critican todo y aportan poco a resolver los males.
Si usted es religioso, levántese todas las mañanas y dele gracias a Dios por Guatemala; si no lo es, basta con mirar nuestro cielo azul o fijarse en la señora que desde muy temprano tiene su puesto en la esquina vendiendo desayunos o dese cuenta que cuando en Guatemala entra a cualquier lugar le dan los buenos días con una sonrisa en la cara. Ocupémonos en aportar, construir y apoyar. ¡Viva Guatemala!