Editoriales

Sobrevivir en Guatemala

Hace muchos años, vivíamos en este bello país llamado Guatemala una vida apacible y de encanto en donde convivíamos con el Duende, El Sombrerón, El Cadejo y otros tantos personajes de la mitología chapina, muy bien descritos por nuestro Premio Nobel Miguel Ángel Asturias, en las Leyendas de Guatemala.

¿En qué momento llegaron a Chapinlandia y se enraizaron?, personajes obscuros y tenebrosos que han proliferado y generado el caos para hacernos perder toda clase de valores morales y las más mínimas normas de conducta y, a su vez el desconocimiento de la justicia, para dar paso a un período de obscurantismo que trae consigo a otra variopinta calidad y cantidad de seres extranjeros que creen que nos harán retomar el camino que ellos mismos han desviado.

Los guatemaltecos debemos comprender y entender, que SOMOS NOSOTROS MISMOS LOS QUE DEBEMOS TRAZAR EL CAMINO y reencontrarnos con nuestras raíces y no esperar a que venga Superman, Batman o el Chapulín Colorado a encontrar e impartir la justicia, que está siendo selectiva y desviada a sabor y antojo de personajes extranjeros que únicamente defienden sus propios intereses y lo que menos les importa somos los habitantes de esta tierra maravillosa, llena de muchos recursos naturales envidiables en otras latitudes, además de encontrarnos en un punto geopolítico muy estratégico para los intereses que nos están queriendo llevar por el camino que nosotros no hemos buscado.

Los gendarmes encargados de las investigaciones en Guatemala han judicializado la política y han politizado la justicia, dando paso con ello a un período que se asemeja al obscurantismo generado o caracterizado por el Santo Oficio de la Inquisición en la época más retrograda de la historia de la Iglesia Católica. No es buscando quien la paga, en lugar de quien la debe, como encontraremos el camino o la vía para alcanzar el pleno desarrollo y el bien común, como reza nuestra Carta Magna.

Mientras el Ministerio Público se dedica a sentenciar mediáticamente y destruir lo que no ha construido y en lugar que realmente se sentencie a los criminales y no llenar las cárceles de personas que luego salen libres por malos procedimientos de investigación y errores pueriles de los encargados de las investigaciones; no lograremos limpiar nuestra patria de tanto mal, pues la justicia debe ser impartida sin preferencias ni orientaciones convenientes para unos grupos y otros no.

Es tiempo señora fiscal general, de dedicarse a perseguir a los verdaderos criminales y realizar las investigaciones que lleven a fortalecer la justicia y no dedicarse al SHOW MEDIÁTICO que destruye y no construye, que la debilita y no fortalece pues no es atacando a medios de comunicación que ya han sido casi mortalmente heridos como logrará fortalecer el sistema judicial, el daño que usted está causando a la búsqueda de la verdad, es muy grande pues se está pasando por encima de nuestra Constitución Política, al tratar de destruir los medios de comunicación que no se prestan a su Show Mediático, esto señora fiscal, la historia lo juzgará muy fuertemente y NOSOTROS SEGUIREMOS ADELANTE contra viento y marea, pues somos personas que siempre hemos luchado por la verdad y creemos que en Guatemala se puede sobrevivir y alcanzar una vida mejor de la que actualmente tiene el común de los mortales de nuestros habitantes, porque creemos firmemente en una NACIÓN DIGNA, JUSTA Y SOLIDARIA.