Cuba acepta integrar la OIM
Cuba aceptó finalmente integrar la Organización Internacional para laS Migraciones (OIM), creada en 1951 y devenida dependencia de las Naciones Unidas para atender la problemática global que mantiene en vilo a muchos gobiernos en esta época y en particular al de la nación antillana.
“Vivimos hoy en un mundo extraordinariamente complejo, en el que la migración ha devenido un fenómeno de alcance y consecuencias globales”, reconoció el embajador del país caribeño en Ginebra, Pedro Luis Pedroso, al formalizar la incorporación en la agrupación.
Y aseguró que, al ingresar como miembro pleno, Cuba ratificaba su voluntad de continuar construyendo una relación estrecha con la OIM y su disposición de trabajar por contribuir al logro de los propósitos del grupo conformado por 168 países, cuyo consejo celebra su 108 sesión en Suiza.
La adhesión a la OMI ocurre en medio de la controversia por los últimos cambios anunciados por el Gobierno de la isla respecto a su política migratoria, que supuestamente implicaron una apertura con relación a épocas anteriores, pese a que mantuvieron las impedimentas de retorno al territorio -al menos en 8 y 5 años- para los médicos, deportistas, funcionarios u otros profesionales que decidieron quedarse en el exterior al concluir las labores encomendadas a ellos.
Pedroso admitió la importancia de fomentar el diálogo y la cooperación internacional para encarar los desafíos que plantea la complejidad creciente del fenómeno de las migraciones. De igual modo, admitió la importancia de promover la comprensión acerca del tema y fomentar el respeto a la dignidad humana y el bienestar de los migrantes.
Foto: Centro para Estudios de Inmigración (CIS)