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La inseguridad en Guatemala

#AMOGUATEMALA

Desde hace ya muchos años los guatemaltecos sentimos que la inseguridad aumenta año con año. Al colmo que al salir de sus casas los pobladores de Guatemala ya no saben si van a regresar vivos y mantienen una psicosis diariamente que ya no confían ni en su propia sombra. Este fenómeno colocó a Guatemala entre los países más inseguros del mundo llevando a que distintos países adviertan y sugieran a sus pobladores a no viajar a nuestra nación, provocando una pérdida económica al sector del turismo y golpeando más a nuestra frágil economía.

La violencia e inseguridad es causado por diferentes factores económicos y sociales. Donde podemos destacar como principal la falta de empleo y oportunidades en el país para que sus pobladores puedan subsistir dignamente. A esto hay que sumarle la falta de educación ignorancia y valores en la mayoría de las personas en la sociedad guatemalteca, esta mezcla abre el camino para que un buen número de pobladores se conviertan desde vulgares ladrones, moto cacos, mareros narcos o policías corruptos. Este problema que afecta a todos los guatemaltecos y los únicos responsables son los guatemaltecos.

¿Por qué los pobladores son los culpables? la responsabilidad y el cambio necesario para combatir la delincuencia tiene que usar como pilar fundamental la familia, la educación y los valores que los padres les puedan enseñar a sus hijos, enseñarles a discernir entre lo que es bueno y lo que es malo, también a respetar las leyes y al prójimo, pero en lugar de eso tenemos generaciones de padres que avalan un mal comportamiento, inclusive aplauden y festejan los hechos de delincuencia de sus hijos, podemos observar como ejemplo cuando capturaron a un marero como inmediatamente salen las mamás y las abuelas llorando por él e incluso dicen “Él es bueno”.

Pero no todo recae solo en los padres, también tiene que haber educación en la sociedad, es decir ustedes y sus vecinos, deben de seguir las normas mínimas de convivencia y respeto mutuo, tienen que tener cultura de denuncia, si conocen un ladrón denunciarlo ante las respectivas autoridades, si los guatemaltecos no inician con estos pequeños cambios, no pueden esperar que el Gobierno que está haciendo con las instituciones encargadas de combatir esto (el Ministerio Público y el Ministerio de Gobernación) solucionen todo, pues está demostrado que estos ministerios se han hecho de la vista gorda en lo que a este problema corresponde.

Lamentablemente en Guatemala las estructuras criminales cooptaron los entes encargados de brindar seguridad tales como la Policía Nacional Civil, institución que nace de la corrupta Policía Nacional, pero a veces parece que solo le cambiaron de nombre pues los mismos agentes de este ente se han visto envueltos en robos, extorsiones, secuestros y siendo sincero a quién en este país no le han pedido la famosa mordida o para las aguas, un agente de la PNC. La formación de esta institución fue supervisada por la sociedad civil, por Hellen Mack, pero sus logros en este tema son los mismos que los de su sobrina en el Ministerio de Salud.

Este ente se encuentra bajo el cargo del ministro de Gobernación, Francisco Rivas, que parece que no se ha dado cuenta de la situación de delincuencia e inseguridad que está atravesando el país pues como todavía no lo cree, mandó a hacer una encuesta con valor de Q50 millones para preguntarle a la población qué tan inseguros se sienten, lo que confirma su nefasta actuación en el mando de esta cartera que más pareciera que llegó a una negociación con las estructuras criminales para dejarlos delinquir en paz.

Pero no solo la PNC está cooptada, pues hace unos meses capturaron a un marero que formaba parte de las filas del Ejército de Guatemala, pues lo vieron como gran oportunidad infiltrar sus filas para cooptar esta institución que bien o mal cuando patrullaban las calles del país, las hacen más seguras, acuerdo que lamentablemente no renovó el gobierno pues para los ojos de la mal llamada sociedad civil se ve mal que el Ejército está en las calles.

Mientras tanto el ente investigador decidió ignorar el problema de las maras y la delincuencia común para cumplir con su agenda golpistas, abatir a los enemigos de la izquierda y a quienes los denuncian y cumplir las órdenes y deseos de un extranjero que ni en su propio país lo quieren, utilizando medios de comunicación vendidos para endiosarse y para distraer a la población de la creciente inseguridad. Prueba de esto son las más de 1.5 millones de denuncias que simplemente no les da la gana investigar.

A causa de que las instituciones encargadas de brindar seguridad le da igual la situación del país, grupos de pobladores indignados hacen justicia por mano propia con comités de seguridad de vecinos, esto conlleva a linchamientos, por otra parte las etnias indígenas del país han optado por poner en práctica castigos mayas. Estas dos situaciones violan las leyes y el debido proceso convirtiendo a los pobladores en delincuentes.

Por otra parte municipalidades como la de Mixco y Villa Nueva decidieron combatir este problema dándole armas a los policías municipales, cosa que puede funcionar al principio pero dependiendo del alcalde de turno se puede volver un caos como sucedió en México donde algunos alcaldes utilizan la policía municipal como su ejército personal y para delinquir.

El cambio está en nosotros y es imperativo que para combatir este problema participemos todos e iniciemos dando el ejemplo, respetando las leyes y teniendo cero tolerancia ante los delincuentes, así como reformar las leyes poniendo mayores condenas y reactivando la pena de muerte. Solo así lograremos rescatar a Guatemala de los grupos oscuros.

 

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Redacción

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