China alienta las inversiones extranjeras con exoneración fiscal
Pekín decidió exonerar temporalmente a las empresas extranjeras del impuesto a las ganancias reinvertido en el país, con el afán de confortar la plaza china en particular frente a la reforma fiscal adoptada en Estados Unidos (EE. UU.)
La medida, revelada este jueves por el ministerio de Finanzas, se aplicará de manera retroactiva a enero de 2017, con la condición de invertir las ganancias en sectores clave definidos por Pekín.
Esta ventaja para las empresas extranjeras se conoce poco después de la ambiciosa reforma fiscal adoptada por EE. UU., que contempla reducir los impuestos a las ganancias de las empresas de 35% a 21%, por debajo del 25% vigente en China.
La medida del régimen comunista «generará un mejor ambiente (fiscal) y alentará a los inversores extranjeros a continuar invirtiendo en China», según un portavoz del ministerio de Finanzas.
Numerosos obstáculos quitan entusiasmo a los inversores que miran a China, además del encarecimiento de la mano de obra y la desaceleración del crecimiento.
Las empresas estadounidenses y europeas denuncian una reglamentación opaca y arbitraria, las restricciones a las inversiones en numerosos sectores, la transferencia obligada de tecnología y el trato discriminatorio que favorece a sus competidores chinos.
Pekín continúa además controlando estrictamente el movimiento transfronterizo de los capitales, por temor a la fuga de capitales. Esto complica a veces la repatriación de fondos de las empresas extranjeras que tuvieron ganancias en China.
Las inversiones extranjeras en China, expresadas en dólares, crecieron 5.4% en los primeros 11 meses de 2017, aunque gran parte del año se contrajeron, según el ministerio de Comercio.
En el primer trimestre, según datos de la Unión Europea (UE), las inversiones europeas en China cayeron 23%.
Con información: @AFPespanol // Foto: afp_tickers