Un mañana mejor
Por: Cesar Rolando Ochoa F.
Los guatemaltecos se despiertan cada mañana impresionados por los medios de comunicación; es interesante ver como los diferentes órganos de nuestro gobierno agasajan a sus ejecutivos y, hasta sus sindicatos, con bonos extraordinarios que van desde mil, hasta treinta mil quetzales o más. Parece justo: si el Congreso ha emitido durante el año leyes en favor de todo el pueblo; si el Ejecutivo ha manejado los fondos del presupuesto con absoluta transparencia y; si la Corte Suprema de Justicia ha actuado en todos los juicios emitidos, con absoluta rectitud y se puede considerar intachable.
Los guatemaltecos honestos y dignos, consideran que cualquier bono, reconocimiento o regalía extraordinaria, debiera ser entregada por una labor digna de encomio y no por razones de compañerismo, favoritismo o lealtad temporal a una causa de tipo particular.
Existe un grueso número de guatemaltecos que en el siglo pasado (siglo XX) contribuyó con su esfuerzo al desarrollo del país; legó a esta generación de: puentes, carreteras asfaltadas, un código laboral para proteger a todos los trabajadores, el IGSS, un código conocido como el Decreto 1485; universidades privadas, etc.
Ahora que está el gobierno tan interesado en repartir bonos de excelencia laboral a la clase trabajadora; sería un buen momento, para honrar a la mal llamada CLASE PASIVA y, que se hiciera un estudio serio, que dignifique a aquellos que dejaron su juventud y esfuerzo por el bien del país. Es tiempo de recordar a la tercera edad, no solo en los momentos electorales, cuando se les requiere para que contribuyan con un voto a favor de candidatos de elección popular.
Ojalá estas notas llegaran a manos de algún ejecutivo, con la suficiente autoridad y poder y se interesara seriamente por ayudar “Hoy por ti, mañana por mí”.