Columnas

Para responder a eventos ciudadanos se debe alfabetizar

No se debe ignorar, ni ser testarudos de no dar importancia a la tenencia de una población alfabetizada

 Por demás importante el evento de la consulta popular para dirimir  el diferendo territorial, insular y marítimo entre Guatemala y Belice, un problema que viene desde los tiempos de la colonia, desde el año 1,638  para explorar y comercializar el palo de tinte, luego en 1763 se concedió permiso a Inglaterra para que se instalaron en el cayo Casina, luego en 1,763 se concedió permiso a Inglaterra para la explotación de madera, extendiendo el área concedida a 4,804 Kilómetros cuadrados.   Posteriormente se amplió otros 1,844 kilómetros cuadrados, haciendo extensivo hasta el rio Sibún, tratándose únicamente de un permiso para el corte del palo de tinte.

En la primera constitución de Guatemala, se señala que el territorio de la Verapaz se ve limitada con la costa sobre el Golfo de Honduras, al sur del Rio Sibún.  En 1859, Pedro de Aycinena, firma un convenio exigiendo una compensación por la construcción de una vía de comunicación que nunca se cumplió y en 1898 Inglaterra estableció un gobierno propio en el territorio de Belice. Estos eventos fueron tomados unilateralmente por los gobiernos de turno, si hacer reclamos basados en una consulta, en donde el pueblo los respaldara para hacerlo por la vía pacifica o a través de un enfrentamiento armado como en algún momento pretendieron ir al rescate del territorio, quedando únicamente en especulaciones.

Guatemala siendo un país civilizado y respetando la vía de la paz, pretende recuperar el área usurpada entre el rio Sibún y el rio Sarstún sometiendo el diferendo a un procedimiento Jurídico internacional.  Es así como Guatemala y Belice llegan a este momento de realizar una consulta popular para dejar en manos de la Corte internacional decida con relación al diferendo definitivamente, y que esta corte actúe en forma ética y moral para bien del territorio de Guatemala.

Si desde 1999, que el canciller Eduardo Stein plantea la posición respecto al diferendo se hubiera planteado, la necesidad de este evento, que después de 20 años, se hubiera considerado un cronograma de actividades bien concatenadas desde el currículo escolar, como contenido importante de la formación cívica de los guatemaltecos respecto a esta problemática y otras que son inherentes al Tribunal Supremo Electoral.  Acudir a manifestar el SI en esta coyuntura, podría estar bien definida en la conciencia ciudadana y tener claro el concepto de lo que se puede lograr, cediendo a  una institución de corte internacional, que intervenga en la solución del problema.

En esta consulta la respuesta debe ser el SI del universo de la población, lamentablemente es a última hora que se tiene la preocupación de concientizar a la población.  No queda otro camino, qué los que tenemos conciencia del problemas, acudamos a afirmar la urgencia de  decir SI, pero, qué pasa con la mayoría de habitantes que desconocen qué es lo que se pretende con llegar a emitir un sufragio.   Además se debe considerar la gran cantidad de analfabetas, que tiene limitaciones de información sobre la importancia que tiene que nos pronunciamos masivamente a decir que SI, para autorizar a la Corte de Derecho Internacional que deicida en la solución definitiva de este  problema territorial.

No se puede seguir siendo miope, ni  testarudos, queriendo ignorar que la gran masa poblacional de Guatemala es analfabeta y seguir empecinados en no querer eliminar este estigma de ignorancia, que nos hace caer  en la falta de conciencia y reflexión para proceder de una forma transparente en eventos de esta naturaleza.

Decir SI, sin saber leer la afirmación SI o la negación con la silaba NO, en el presente caso, el diseño de la boleta hubiera facilitado a los analfabetos el SI acompañado del mapa de Guatemala completo, incluyendo Belice y el NO, con el mapa sin el territorio de Belice, para que la población analfabeta distinguiera el SI del NO.  Con el estigma del analfabetismo, cada vez que se practique una actividad cívica y democrática de elección, siempre estará opacada y manipulada por las fuerzas del mal y los intereses de los poderosos.