Desperdicio
Personas & Personas
En la búsqueda de poder eficientar al máximo los recursos materiales y financieros de cualquier organización surge una herramienta muy útil denominada “LEAN” que centra su metodología en eliminar e identificar los “desperdicios” en los procesos o en la entrega de un servicio. Pero… ¿cómo consideramos un desperdicio? Respuesta: Todo aquello por lo que no está dispuesto a pagar nuestro cliente y que encarece nuestro producto o servicio.
Los principios lean son:
- Especificar el valor: descubre cuál es el valor que aportas a tu cliente.
- Identificar el flujo de valor: piensa en todas las actividades que tienes que hacer desde el inicio hasta el final con tu producto o servicio, hasta que llega a las manos de tu cliente, e identifica qué actividades no aportan valor.
- Flujo: elimina todas las actividades que no aportan valor y el resto trata de que se ejecuten una tras otra sin esperas entre ellas.
- Pull (atracción): nos pondremos en marcha sólo cuando haya pedidos y sea el cliente el que traiga el valor.
- Perfección: trata de ser cada vez mejor, compárate con el pedido anterior, esto te ayudará a mejorar más.
¿Qué tipo de desperdicios existen?
Sobreproducción: producir más de lo que nos piden nuestros clientes. Eliminar al máximo los productos en almacén, fabricar solo los flujos de venta, más un 10%
Tiempos de espera: el tiempo es uno de los recursos que más le cuestan, debemos de cuidarlo al máximo, un desperdicio en el tiempo puede ser: cuando un proveedor no cumple con los tiempos de entrega establecidos y eso retrasa la producción u operación.
Transportes: si no llevamos una logística adecuada, un control de los envíos, y una metodología certera, los traslados de material se vuelven un problema.
Sobre-procesamiento o procesos inadecuados: esto se refiere a hacer más operaciones de las necesarias, que no te de… parálisis por análisis.
Defectos: Si hacemos la práctica de prever dónde se ocasionan los defectos nos evitaremos muchas reclamaciones.
El talento humano: Entiende a tu gente, averigua lo que hacen bien y lo que les gustaría hacer. Te sorprenderías de la cantidad de expertos que hay en tú organización y que hacen tareas únicas.
Posiblemente haya muchos más “desperdicios” en tu organización, pero recuerda la premisa: es toda aquella actividad humana que absorbe recursos, pero no crea valor.

Lea más del autor: https://elsiglo.com.gt/2019/07/06/por-la-matriz/