Columnas

Día Internacional de la Democracia

Tanmi Tnam

A partir del 2007, la Organización de las Naciones Unidas ha declarado que el 15 de septiembre de cada año, se celebre el Día Internacional de la Democracia por ser una organización política que propicia, entre otras acciones, la participación de los pueblos a elegir sus autoridades haciendo uso de elecciones libres. Sin embargo, en muchos países del mundo, solamente se habla de democracia, las autoridades y muchos politiqueros discursan bonito acerca de ella, los púlpitos religiosos en algunas ocasiones hablan de democracia, las escuelas repiten de memoria lecciones sobre ella y la educación superior dicta conferencias sobre el tema. Pero es válido reconocer que en todos los Estados hay desigualdad, pobreza, opresión y falta del reconocimiento de pueblos enteros, especialmente el caso de los pueblos originarios. En el caso del Estado de Guatemala, tiene problemas de vivir en democracia cuando las autoridades se someten al dictado de otro Estado solamente para asegurar el futuro de grupos dedicados a la corrupción. Con estas actitudes y decisiones, se han olvidado de las condiciones políticas que hacen posible la autodeterminación y la soberanía de los pueblos.

En cuanto a la participación de la ciudadanía, esta cuenta con limitantes debido a la falta de información, escasa cobertura de educación escolar y un currículum que miente de manera permanente, exclusión por motivos de pertenecer a una cultura que no es la considerada superior. La participación, es considerada una mercancía cuando en elecciones de autoridades se recurre a la compra de votos o a la distribución de regalos entre los más empobrecidos para que voten por determinado partido político. Hay democracia si hay inclusión de todas las personas y de los pueblos originarios. Se entiende la democracia para pueblos indígenas como aquella respuesta política al reconocimiento pleno de la participación y de su representatividad para la disminución y eliminación de hechos que violan los derechos individuales y colectivos como la discriminación, el racismo y la marginación de acceso a los servicios públicos de salud, educación y justicia. Entre otros derechos están el acceso a la tierra, la relación con el territorio, la identidad, mantener sus propias organizaciones, el uso de los componentes de la cultura y el idioma materno en instituciones públicas.

Se reconoce que con la democracia se construye la paz al interno de los países y entre los Estados del mundo, debido a que con la participación de todos se buscan los medios y las alternativas que disminuyen o eliminan los conflictos económicos, sociales y políticos. Cuando las personas y los pueblos forman parte de un gran proyecto político donde todos son importantes y son tomados en cuenta, este proyecto político debe atender las respuestas a las necesidades y problemas que tienen los habitantes del Estado. Donde hay democracia hay mejores condiciones de vida y desarrollo para todos, nadie está fuera de los beneficios y entre todos aportan esfuerzos para que se alcance el país que se desea.

La democracia en un pueblo propicia gozar de justicia donde todos son iguales, no hay privilegios, no hay quienes gozan de impunidad, los corruptos deben ser castigados y suficiente seguridad para aquellos que asumen la defensa de los derechos humanos individuales y colectivos. En un país democrático, la libertad de expresión de opiniones es apreciada y la vigencia y respeto a las cosmovisiones distintas debe ser un hecho. Hay que seguir luchando hasta alcanzar plena democracia para el beneficio de todas y todos.

TEXTO PARA COLUMNISTA

Lea más del autor: