Lo que nos deja cada invierno
Lugar Hermenéutico
Cada año la época lluviosa en el país nos vuelve a recordar lo vulnerable que somos ante la fuerza de la naturaleza, inundaciones, derrumbes, repunte de enfermedades, daños en la agricultura, colapso de infraestructura, en fin, una serie de sucesos recurrente que sin embargo aumentan con intensidad año con año.
Hace algunas semanas todos hablábamos del libramiento de Chimaltenango, las inundaciones en El Naranjo, sin embargo, como suele ocurrir, con los días estos sucesos van perdiendo vigencia e importancia, hasta que un nuevo aguacero nos vuelva a recordar lo débil que podemos ser ante la madre naturaleza.
Actualmente Guatemala esta entre los 20 países más vulnerables de acuerdo con el índice de riesgo climático a nivel mundial, este estudio toma en cuenta dentro de diversos criterios la pérdida de vidas humanas y pérdidas económicas en cada fenómeno extremo que ocurre en los países.
Vale recordar tragedias como las ocurridas en El Cambray o en múltiples comunidades como las de hace algunos años en Tajumulco, o en colonias de la periferia de la ciudad que ante algún fuerte aguacero sufren los derivados deslizamientos de suelo y las amplias secuelas de personas afectadas, viviendas con daños y muchas veces víctimas mortales.
De acuerdo con el profesor emérito de la Universidad Nacional de Ingeniería del Perú, Julio Kuroiwa, “una población es vulnerable porque carece de conocimientos de los fenómenos naturales intensos que la amenazan y no sabe qué medidas tomar para proteger su vida, salud y propiedades. También es vulnerable porque no está organizada para reaccionar.
En este sentido y finalizando la época de lluvias en el país, merece la pena que las autoridades pertinentes realicen un recuento de los daños en este invierno, que permita el siguiente año poderse anticipar con sistemas de pronóstico, alerta temprana y medidas de adaptación, para lo copioso de las lluvias que seguramente seguirán aumentando en intensidad.
Así mismo es importante procurar un sistema de organización comunitaria o municipal para responder ante cualquier eventual emergencia. Este invierno ya se fue, tenemos valiosos meses para preparar las condiciones del próximo y evitar en lo posible las secuelas en la población, principalmente de la más pobre y vulnerable del país.

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