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La Zanahoria

Editado Para La Historia

Sabemos que una de las verduras más socorridas en la gastronomía de casi todos los países es la zanahoria, de la mano de papas, nabo, carnes… La zanahoria no solo aporta todos los nutrimentos que contiene, sino que también le da un hermoso toque de color al preparado, y sabido es que la comida entra por los ojos.

Pero la zanahoria no siempre fue como la conocemos hoy. Se supone que la zanahoria es oriunda de las zonas de los actuales Irán y Afganistán. La zanahoria fue difundida por todo el centro de Asia y el cercano Oriente. Se han encontrado restos de zanahoria en cuevas suizas, antiguos asentamientos del hombre de Neardental. Las primeras zanahorias de las que tenemos noticias eran de diferentes colores: había zanahorias blancas, que actualmente se utilizan en Europa como forraje, las había rojas, violetas, amarillas, incluso algunas alternaban estos colores. Durante el Medioevo llegó a Europa desde Siria una variedad que era roja, pero no tuvo mucha aceptación porque decía la leyenda que su color se debía a la sangre vertida por una católica martirizada por los romanos.

Los griegos y los romanos ya la conocían. Los griegos la llamaban “karotón”, pasando al latín como “carota” y de él al inglés “carot” y al francés “carrotte”. En español la palabra por la que conocemos esta legumbre se adjudica a la palabra árabe “isfannariyhya”. Los romanos no la consumían como raíz, sino que consumían sus hojas que utilizaban para sopas. También de ellas apreciaban su agradable olor y se utilizaban en particular para curar los trastornos de la vista. En América también se conocían otras variedades de zanahoria antes de la llegada de los españoles. Los nativos de Venezuela la consideraban un alimento de primera y los colonos ingleses asentados en la colonia de Ohio, en los Estados Unidos de hoy, decían que los indios los atacaban para robarles sus zanahorias. Durante el medioevo europeo no se comía mucha zanahoria porque su piel era muy dura, bastante insípida y su núcleo era extremadamente fibroso.

Resulta que cuando comienza a tomar forma la nación holandesa, allá por el siglo XVI, fueron los nobles de la Casa de Orange (antiguo principado de Francia) los que fueron reconocidos como príncipes y reyes de lo que hoy son los Países Bajos que conocemos. Los príncipes herederos del trono holandés llevan el título de Príncipe de Orange (o Princesa de Orange, como es el caso de la actual Princesa de Orange, Catalina Amalia, hermosa joven en nuestros días y futura reina de ese país). Fueron los agricultores holandeses los que, en sus invernaderos y por un proceso de adaptación e hibridación, combinando la zanahoria roja con la blanca, lograron una variedad de color naranja en honor a su familia real. Sabemos que en muchos idiomas orange significa naranja, zanahoria creada como prueba de lealtad a sus reyes. Después se dieron cuenta de que esta zanahoria no solo era agradable a la vista, sino que tenía mejores características que las zanahorias conocidas hasta entonces, a saber: una piel más suave, un núcleo menos fibroso y también, en un proceso de adaptación e hibridación, una carne más ligera y agradable al gusto. Hoy son las variedades de zanahorias naranjas las que más se consumen en el mundo, salvo las blancas que son las preferidas en Extremo Oriente.

En el año 1910 se descubrió el betacaroteno, tan abundante en la zanahoria. El betacaroteno es protovitamina D, necesaria para el desarrollo de los huesos, bueno para la vista y la piel. Es a partir de este descubrimiento que aumenta en el mundo el consumo de la zanahoria. Si una persona consume zanahoria en exceso durante varias semanas, el betacaroteno puede subir a la piel, dándole una tonalidad anaranjada. Esto se elimina naturalmente a las pocas semanas de dejar de consumir zanahoria.

La zanahoria apenas tiene calorías y casi 0% de colesterol. Para su consumo, la zanahoria se debe raspar y no pelar porque es precisamente en su piel, como en muchas otras frutas y hortalizas, que encontramos la mayor parte de vitaminas y nutrientes. La zanahoria no solo tiene vitaminas sino también muchos minerales necesarios al cuerpo humano. La zanahoria se puede cocinar en muchas formas y a pocas personas se les ocurre prepararla como si fuera un puré de papa. Una vez hervidas y aplastadas, a las zanahorias se les añade crema de leche y mantequilla, al gusto. Es un excelente acompañante para cualquier plato de carnes, saludable, sabroso y barato. También se puede consumir como una sopa añadiéndole crema de leche y un poco de queso.

Ahora ya sabemos cuál es el origen de la zanahoria, por qué es naranja y en honor a quién lleva ese color.

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Franck Antonio Fernández Estrada

traductor, intérprete, filólogo ([email protected])

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