Columnas

El poder del Cuarto Poder

Políticamente Incorrecta

En estas dos décadas del Siglo XXI hemos visto como el cuarto poder, los medios de comunicación, han no sólo evolucionado por la tecnología, sino llegado a ocupar un papel muy particular en la vida de las naciones en el mundo libre. Digo en el mundo libre porque en Venezuela, Cuba, Irán, Corea del Norte, China, y el mundo árabe son controladas en gran medida por los gobiernos o dictaduras en el poder. En Europa, cómo en todo el Continente Americano, exceptuando los mencionados, los medios son libres de elegir que quieren transmitir a sus lectores, televidentes o radioescuchas.

Los medios escritos en Guatemala están pasando a mejor vida. Cada vez más, son sólo digitales. Han unido a lo digital los vídeos que tanto nos gustan a todos, porque dejan ver algo más de la esencia de quién transmite. Y las redes sociales, para quien tiene un teléfono inteligente, son la fuente primordial de información constante. Pero todos necesitan fondos para sobrevivir, y allí son comprables.

Los medios se han constituido en jueces y jurados que le dicen a la población quién es culpable, antes de ser imputado judicialmente. Condenan antes de ser vencidos en juicio, elevan o hunden al individuo según sea de su agrado o desagrado.

Tergiversan la verdad, emiten opinión para influir en la opinión pública, inclinarla hacia un lado o hacia el otro. Los días de transmitir una noticia sin emitir opinión que refleje la visión o preferencia del periodista, son historia. Difamar, desacreditar, son hoy herramientas útiles para destruir a la gente.

En nuestro país, adicionalmente, llegan al colmo de desinformar a la población con temas que responden a la agenda del medio o del periodista. Una cosa es ser analista y tener una columna de opinión, cómo la mía, dónde uno libremente emite eso, su opinión, y otra es reportar las noticias en forma sensacionalista. Eso, lleva un trasfondo, una intención a veces obvia y a veces oculta, pero no es objetiva. Los analistas como yo, de República, de El Siglo, Noticiero El Vigilante y otros medios virtuales, escribimos gratis, por amor al arte. Los reporteros de los medios, son pagados.

Por ejemplo, reportan que “el Congreso de los Estados Unidos” emite un mensaje, cuando en realidad, es una o un par de Congresistas, no los 100 Senadores del Senado, ni los 435 miembros de la Cámara de Representantes. Lo que diga una Congresista, tipo Norma Torres, tiene sólo relevancia en Guatemala, porque los medios así se lo venden a su audiencia.

Reportan que el Presidente Donald Trump no le dio la mano a la Speaker Nancy Pelosi. Pero no les dicen, porque ignoran la mitad de lo que debieran saber y no investigan… o es mala fe, que la Speaker faltó al protocolo al anunciar al Presidente Trump ya que debió decir, por protocolo, “es un honor y un privilegio para mí presentarles al Presidente de los Estados Unidos”. Así que la que irrespetó al Presidente, además de todos los improperios que le ha dedicado desde que tomó posesión del cargo, fue Pelosi.

Los medios endiosan a sus intelectuales de izquierda, los alaban, elevan y revisten de una cuasi santidad que cuando los trapos sucios de éstos salen a flote, los esconden. Y detestan a los “políticos” como Trump o Bolsonaro, que no son políticos porque son totalmente políticamente incorrectos. No entienden cómo un líder puede decir lo que piensa sin tapujos, llamar a las cosas por su nombre, ser irreverente, no ser hipócrita, y atreverse a decir lo que los ciudadanos decimos todo el tiempo. Critican a la “clase política” pero cuando alguien distinto sale a flote, tratan de destruirlo.

Son en suma, mercenarios de la pluma, que tristemente se venden al mejor postor. Será interesante ver cuanto dura la luna de miel del Presidente con los medios.

Tienen una responsabilidad enorme. Ojalá amaran más al país para no venderse, e informar sin sesgo alguno.

TEXTO PARA COLUMNISTA

Lea más de la autora:

Betty Marroquin

Licenciada en Relaciones Internacionales, especialista en el Congreso de los EEUU.