La creatividad y la innovación

Punto de Vista

La creatividad y la innovación son dos términos diferentes, pero que se relacionan y en conjunto, refuerzan el éxito de organizaciones y países. Aunque ser innovador para un país no es lo mismo que para una empresa, pero utilizan los mismos conceptos.

En ese sentido, fomentar estas dos capacidades es uno de los caminos para convertirse en referentes o líderes en un sector determinado. A pesar de lo anterior, no es una tarea sencilla. ¿Por qué no lo es? Porque la creatividad y la innovación, no importando cuál sea la organización o el negocio, implican obligatoriamente: investigación, conocimiento y mucha disciplina.

Según los autores Díaz y Justel (2019), la creatividad es la capacidad de generar soluciones, ideas nuevas y útiles, o asociaciones múltiples, alternativas y variadas a un problema o estímulo dado, existiendo diferentes modelos cognitivos que explican cómo funciona nuestra capacidad de crear y diferentes factores asociados al rendimiento creativo como, por ejemplo, el sexo, la personalidad o el entrenamiento.

Para el caso de la innovación, Peter Drucker señala que es el medio a través del cual se crea nuevos recursos generadores de riqueza o dota a los recursos existentes de mayor potencial para crearla. La innovación rara vez surge de un destello de inspiración. Por el contrario, según este autor, surge de un frío análisis de siete tipos de oportunidades: acontecimientos inesperados, incongruencias, necesidades de proceso, cambios sectoriales y de mercado, cambios demográficos, cambios de percepción y nuevo conocimiento. Para Drucker, en la innovación, como en cualquier otro esfuerzo, hay talento, hay ingenio y hay conocimiento, requiriendo de trabajo duro, enfocado y decidido.

Así, la gestión del conocimiento es un factor clave para crear condiciones y de facilitar que los flujos de conocimiento circulen mejor, por lo tanto, de incentivar la creatividad y la innovación. Sumado a esto, la inversión en tecnología no alcanza para que se transforme una organización en creativa e innovadora. El conocimiento y la inversión en el capital humano, es el elemento esencial.

En síntesis, la creatividad es un proceso o capacidad mental de generar soluciones e ideas. La innovación tiene que ver con llevar esas ideas a la práctica, creando nuevos recursos o dotando a los existentes de un mayor potencial, que como bien señala Drucker, son generadores de riqueza. La innovación se refiere, entonces, a un nuevo valor, no a cosas nuevas.

Robert Atkinson, padre del Índice de Innovación Global (GII), resalta que menos proteccionismo, más educación y una estrategia nacional, es el camino para lograr la innovación. El Índice de Innovación Global, es una radiografía de los países de distintas regiones del mundo sobre la base de 79 indicadores, estudia qué factores convierten a un país en innovador.

Suiza, vuelve a liderar como el país más innovador del mundo, gracias a una economía basada en el conocimiento y convertir las ideas innovadoras en proyectos lucrativos.

Para el caso de Guatemala, se ubica en el puesto 106 en el Índice de Innovación Global 2020 (IIG), de 131 países evaluados y figura en la última posición de 16 países de Latinoamérica. Las primeras posiciones las lideran Chile (puesto 54), México (55) y Costa Rica (56).

La senda de la innovación como país, o por lo menos para abandonar ese último lugar en América Latina, la receta parece estar en la mejora del conocimiento, la educación, agregando la institucionalidad, la transparencia, el combate a la corrupción y dejar el proteccionismo y los monopolios, como otros factores a considerar. Fácil, en lo absoluto, posible, siempre.

Referencias

  • Diaz Abrahan, V., & Justel, N. (2019). Creatividad. Una revisión descriptiva sobre nuestra capacidad de invención e innovación. Rev. CES Psico, 12(3), 35-49
  • Drucker, Peter F. 2004. La disciplina de la innovación. Harvard Business School Publishing Corporation.
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Grisel Capó

Candidata al doctorado de Liderazgo Organizacional de la Universidad San Pablo de Guatemala. Licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad de la República Oriental del Uruguay. Magister en Relaciones Internacionales por la Universidad Rafael Landívar. Pos- Grado en Estrategia Nacional del Centro de Altos Estudios Nacionales de Uruguay y egresada del Centro de Estudios Hemisféricos de la Defensa, Estados Unidos. Diplomado en Antropología de las ciudades por la Universidad Rafael Landívar y el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social de México, entre otros cursos.