La hecatombe de la deserción escolar por la pandemia
Pinceladas Democráticas
Es momento de capitalizar los esfuerzos y las experiencias exitosas del MINEDUC; programas y proyectos que quedaron como ejercicio en una muestra del universo de la población escolar
Las secuelas del COVID19 agravarán indicadores de ignorancia y analfabetismo y obliga a crear métodos de aprendizaje, aprovechando las experiencias pedagogías exitosas que Ministerio de Educación puso en práctica en la modalidad de plan piloto; es momento de utilizarse para mejorar la calidad de la educación en el corto plazo, en la nueva normalidad.
Al conocer los datos preliminares, que confirman que 160 mil niños abandonan sus estudios, sumados a los miles de niños que no lograron admisión; cifras que se desconocen, agudiza las limitaciones de la calidad educativa y la que se avizora; si dejamos de ser creativos para reinventar los procesos de aprendizaje que beneficien al capital humano para mejorar los indicadores de calidad de vida de los guatemaltecos, seguiremos condenados a arrastrar esos males apocalípticos.
La tarea para erradicar los males de la ignorancia y el analfabetismo en Guatemala ha constituido una lucha de los educadores que le hemos apostado y trabajado para alcanzar el desarrollo de los pueblos, y de los grupos marginados que por los principios de igualdad y fraternidad deben vivir en mejores condiciones de vida.
En tiempo normal, el mal del analfabetismo que es sinónimo de ignorancia, ha sido manejado por las fuerzas de poder, que han pretendido eternizar la imposición de políticas absurdas para mantener al pueblo bajo el dominio mediante el manejo de su ignorancia y su explotación. Esta vez se suma las consecuencias de la pandemia del COVID19, provocando que el sistema educativo viviera en el 2020, un ciclo escolar atípico que los expertos le llaman el “ciclo escolar perdido”, que podemos recuperar, si enfrentamos el desafío de recuperar el porcentaje significativo de deserción escolar, para evitar que esta situación se convierta en un caldo de cultivo para hacer crecer los indicadores de ignorancia y analfabetismo.
Si la conexión de internet en Guatemala es menor del 20%, si la tercera o cuarta parte de las familias no tienen acceso a internet y a la televisión; la pobreza que limita el pago de internet, indicadores que señala Carlos Carrera representante de UNICEF en Guatemala, en la entrevista realizada y publicada por el rotativo Prensa Libre del 18 de enero del 2021, constituyen limitantes para hacer efectiva la modalidad virtual, que no es permitido universalizar el aprendizaje, se hace necesario buscar otras alternativas. El MINEDUC debe tener capitalizados en sus archivos los programas exitosos del proyecto BEST USAID específicamente del componente de “Radio Interactiva Español- idioma maya y Aprendiendo matemática por radio”, que cobra vigencia para utilizar la experiencia, para llegar al universo de estudiantes; considerando que la radio es el vehículo de comunicación de mayor cobertura y de menor costo para establecer comunicación con los habitantes de las áreas geográficas más abandonadas.
En su momento se consideró que los programas de alimentación escolar, la dotación de útiles escolares, de materiales didácticos para los maestros y el fondo de gratuidad, podrían contribuir a evitar la deserción. Por otro lado permitiría mejorar la matrícula escolar en tiempos de normalidad; los cuales contribuyeron en un porcentaje moderado. En estas circunstancias esos programas, han dejado de ser viables para evitar la deserción escolar que se viven en la actualidad.
Es momento de capitalizar todos los esfuerzos y las experiencias que posee el MINEDUC para diseñar un plan estratégico con los programas y proyectos que vale utilizarlos para contribuir a mejorar la escolaridad del capital humano para reinventar la Guatemala que soñamos.

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