Importancia de las tasas de interés líder en las economías

Crisol Literario

Porqué los Bancos Centrales prefieren trabajar con la inflación subyacente y no con la inflación total.

En reciente columna se analizó la variable e índice “inflación” en sus diferentes tipos o formas de la inflación, así como de su importancia en la socioeconomía de un país y se revisó, en términos de porcentaje, el efecto de la inflación importada (0.88%) en la inflación total para Guatemala (2.92%), a noviembre del 2020. Indicando que la inflación importada explicó para esa fecha el 0.67% a la inflación total. Se comentó que para el presente año 2021, aún no se tiene el cálculo de esta variable ‘Inflación Importada’ debido a la crisis pandémica Covid-19. Al menos para #Crisol Literario. No obstante, es importante estar pendientes de la inflación importada debido a la saturación de dólares US$ en el mercado de divisas fuera y dentro de los Estados Unidos de América, debido a los distintos niveles inflacionarios que puedan suscitarse en los países con quienes Guatemala tiene relaciones comerciales.

Igualmente, se analizó, la “Inflación Subyacente” y del porqué los Bancos Centrales prefieren trabajar con la inflación subyacente y no con la inflación total. Este recordatorio es válido en virtud que en el presente pasaje se analiza la variable o índice ‘Tasa de Interés Líder’ y su importancia en las economías y una de sus virtudes es que los cambios de ritmo de la Tasa LÍDER de interés, es que incide directamente en el control y regulación de los niveles de inflación y de igual importancia tiene influencia en la variación de cambio del crecimiento del producto nacional, llamado PIB. Seguramente, con estas dos razones, el lector encontrará la importancia nacional de la ‘Tasa de Interés Líder’.

Suele suceder que las autoridades monetarias de los países cuando deciden el cambio de sus políticas, monetarias, cambiaría y crediticias con frecuencia argumentan su criterio con base en la posición cíclica en que se encuentra su economía en el año fiscal de turno. La fase cíclica (ver gráfica) en que se encuentra la economía determina el tipo de política monetaria y de política fiscal para responder a las metas multi-anuales en el tipo de cambio, gasto público, franja inflacionaria, recaudación tributaria que vendrán a influir en tres grandes rubros: 1. Balanza Comercial, 2. Crecimiento o decrecimiento del producto nacional y 3. Nivel de reservas internacionales. Incluso,  en una cuarta opción; estas variables, determinan el nivel del flujo de Inversión Extranjera Directa. Y más importante  aún, debido al relajamiento o expansión económica de la política monetaria estadounidense que viene a fortalecer las exportaciones de materias primas de la región Latinoamericana. Desde luego, siempre sin perder de vista que el dólar US$ es la moneda refugio (en que se ancla la divisa de la mayoría de los países latinoamericanos e incluso a nivel internacional). Con esto se desea interpretar que las variaciones (+/-) en las tasa de interés Líder o Federal en Estados Unidos tiene incidencia directa en el comercio internacional y en los flujos de inversión extranjera directa. Por lo que la moneda estadounidense (US$), siempre debería ser un foco de especial atención.

En virtud que la orientación o ruta económica (política monetaria y política fiscal) de todo país queda argumentada en función de la fase del ciclo económico (expansión, moderación, desaceleración y aceleración) en que se encuentra el referido país, en un determinado ciclo fiscal. En esa virtud, se presenta a continuación la gráfica “ Fases del Ciclo Económico 2019,  que permitirá analizar las posibilidades de crecimiento en la región Latinoamericana y en la región de la Eurozona. Antes, se hace la observación que los países de América cuya economía se encuentra dolarizada (Ecuador, Panamá y El Salvador) están en fusión directa de la política monetaria que determina la Reserva Federal Estadounidense -FED-. Al tiempo que en los países de la Eurozona, la política monetaria la determina el Banco Central Europeo. Quedando a los países socios, el margen o grados de libertad de actuar, únicamente con las herramientas fiscales (Impuestos y gasto público) y esto los limita en su maniobra de salvaguarda en tiempos de crisis. En el caso de Guatemala y otros países de la región se tiene la oportunidad que las autoridades monetarias y el ministerio de Finanzas Públicas pueden echar mano de las herramientas monetarias, cambiaría y crediticia; como igual, de  la política fiscal.

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Análisis de la gráfica. Con la salvedad que la gráfica y su interpretación aplica para el recién antepasado año 2019, antes de la pandemia. Tras el análisis de la gráfica per sé se hará un esquema de como el período de pandemia Covid-19 ha vendido a afectar estas tendencias. En efecto, como lo muestra la gráfica, la posición cíclica para cada uno de los países seleccionados, muestra un comportamiento diverso, lo que refleja el desempeño económico de cada uno de ellos con respecto a su nivel potencial.

Por ejemplo, los Estados Unidos de América, la República Popular China y la Zona del Euro, si bien se encuentran en la etapa de auge del ciclo, su actividad económica se ubica en la fase de moderación, es decir que, en términos generales, los crecimientos observados son ligeramente superiores a los de su Producto Interno Bruto potencial. En el caso de la mayoría de países de América Latina con esquema de metas explícitas de inflación (EMEI. Terminó o concepto que ha sido referenciado en artículos anteriores), la actividad económica se encuentra en el área de caída, es decir que, en términos generales, dichos países registran crecimientos por debajo de su nivel potencial, aunque en la mayoría de casos, se ubican en la fase de aceleración. Por su parte, la actividad económica de Guatemala, se encuentra en la fase de expansión, por lo que, de acuerdo con las estimaciones vigentes para 2019 , la actividad económica  creció por arriba de su nivel potencial en 2019. claro, acá, cuando se hizo la proyección para el 2020, nunca se pensó en una pandemia y máxime de la magnitud de  Covid-19. El año 2020 vino a tras-tocar las proyecciones multi-anuales.

En este contexto, es importante reseñar que Covid-19 ha provocado un desacoplamiento de los ciclos económicos (vistos en la gráfica anterior) y ha requerido de una respuesta de política monetaria distinta en cada caso, aunque macroeconómicamente congruente con las distintas presiones inflacionarias, tanto observadas como esperadas, de cada uno de los países seleccionados. En este particular sentido, la referencia principal es Estados Unidos, ya que su moneda US$, sigue siendo la divisa refugio o de referencia de muchos países a nivel internacional. Se conoce en este caso que la Reserva Federal -FED-, ha indicado en la presente semana que continuará con una política expansiva o acomodaticia vendiendo letras del tesoro, bonos y otros documentos de deuda, hasta ver recuperar su economía. Además, indican que la inflación, la podrán frenar o controlar cuando hayan señales de riesgo y estiman que el retardo de aparición de la inflación demore para finales del 2022. Aunque existe el riesgo de la curva invertida de las tasas de interés; esto es, cambio de signo (+/-), lo cual ocurre cuando los costos de deuda pública son más caros a corto plazo.

Esta sencilla fórmula de abundancia en la oferta de dólares, gasto público y de bajas tasas de interés del dólar, que a su vez guarda relación directa con el tipo de cambio está ocasionando preocupación en las economías de distintos países. Esta preocupación es debido, como se ha indicado, a la posición cíclica en la que se  encuentra cada país (ilustrativo es volver a ver al gráfico anterior).

Para el caso de la Eurozona, las autoridades del Banco Central Europeo han comentado: “Las expectativas de inflación se mueven más rápido de lo que los bancos centrales desearían. El optimismo sobre las vacunas y la llegada del próximo paquete fiscal de 1,9 billones de dólares en EEUU ha provocado una venta masiva de deuda soberana a largo plazo. Durante muchos años, los responsables de la política monetaria habían soñado con este momento, una inclinación de la curva de tipos, pero ahora llega en un momento en el que puede convertir la recuperación en una pesadilla”.

Continúan indicando que: “El gran problema es que se produce en un momento distinto para cada economía. En EEUU, los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años han aumentado más de 40 puntos básicos desde finales de diciembre, arrastrando al resto de la deuda europea y asiática. El movimiento se ha producido en un amplio margen geográfico. Ayer el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, interpretó el reciente aumento de los rendimientos de los bonos como «una declaración de confianza» de las perspectivas económicas, pero para el resto de bancos centrales no es tan buena noticia”. Fin de la declaración.

El equipo de #Crisol Literario considera que para la Eurozona, esta realidad de tipos de cambio a la baja y oferta monetaria US$ con la finalidad de recuperar el empleo, dar oxígeno a empresas productivas y generar confianza en los agentes económicos estadounidenses  CONLLEVA al doble déficit fiscal a los países de la Eurozona consistente en que se podrán ver obligados a subir la tasa de interés del Euro haciéndolo más caro. Y con ello, desincentivando la producción comercial. Además, el tipo de cambio comercial se fortalece desfavoreciendo y debilitando  las exportaciones  con la consecuente pérdida por Cuenta Corriente en la Balanza de Pagos. Y aquí.., toma forma el doble déficit fiscal: un Euro sobre valorado y una pérdida por Cuenta Corriente en la Balanza de Pagos y lo que agravaría la situación es que los países -Eurozona-  sin poder accionar con mayor fuerza económica, ya que solamente disponen de las herramientas fiscales (impuestos y gasto público), por estas razones, entre otras de igual interés para las economías de la Eurozona, las autoridades del Banco Central Europeo, han emitido boletín de alerta.

Para el caso de las Economías emergentes en Latinoamérica, la situación de la política monetaria expansiva o acomodaticia estadounidense, viene bien para las relaciones comerciales con Estados Unidos ya que bajas tasas de  interés del dólar US$, traen consigo  alza en los precios de las materias primas (crudo, minerales y vegetales), por el lado de las exportaciones hacia Estados Unidos. Y por el lado de las importaciones, Latinoamérica importa bienes de equipo (automotores, electrodomésticos y maquinaria agrícola), es una relación comercial positiva para Latinoamérica. Incluso, con mayores entradas de inversión extranjera directa. Por todo lo cuál, los países de la región deben aprovechar ese buen Costo de Oportunidad.

A continuación, se presenta gráfica que ilustra tasas de interés de política monetaria para el año 2019, de Estados Unidos de América, países de Latinoamérica y de Guatemala. Como se ha indicado, el año 2020, fue un año atípico que ha movido a las economías dar un giro o golpe de timón de sus respectivas planificaciones multi-anuales. Como bien se visualiza, ya para finales del año 2019, las principales economías emergentes de la región venían moderando hacia la baja la tasa de interés de sus monedas. La crisis pandémica aceleró el relajamiento expansivo o acomodaticia de la política monetaria con el ánimo de evitar una desaceleración profunda de la economía; y con ello, evitar una recesión económica. Para el caso de Guatemala gracias a la estrategia EMEI = Esquema de Metas Explícitas de Inflación, reservas de divisas acumuladas el uso adecuado de herramientas de política monetaria. Gracias a ello, Guatemala mantuvo una política expansiva y acomodaticia, como se ha visto en fascículos anteriores, alineadas a su fase de posición económica, como se muestra en la primera gráfica. Desde luego, la crítica constructiva para el gobierno es que no ha sabido aprovechar esta favorable circunstancia para derramar, la proporción correspondiente de la economía a la población socioeconómicamente vulnerable del país. Es una deuda histórica que se debe resarcir, tan pronto como posible.

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Asimismo, para el caso de Guatemala y dadas las circunstancias de prevalencia de  Covid-19, la política monetaria acomodaticia continúa siendo apropiada para apuntalar la demanda agregada y el empleo, estando atentos a repuntes inflacionarios.

Finalmente, es importante tomar en cuenta la favorable perspectiva económica y que los riesgos de inflación están sesgados a la baja; entonces, la política fiscal puede desempeñar un papel más activo, sobre todo si existe un margen limitado para relajar la política monetaria. Esto, traducido a otros términos es: “política acomodaticia, pero por el lado del gasto público bajo el criterio de Gestión por Resultados -GpR- mediante un buen Presupuesto 2021 que sea técnicamente legal y socialmente legítimo, por parte de la Administración de Gobierno. Y por el mismo lado de política fiscal, favorecer el crecimiento empresarial mediante una pronta devolución del crédito fiscal y otras herramientas al alcance de la Administración Tributaria que oxigene el sistema de micro, pequeña y medianas empresas -Mipymes. Esto es urgente en Guatemala para INICIAR el despegue socioeconómico, desde ya; y reiniciar igual, el día después de Covid-19, con buen pie la restauración social, económica y política del país. Iniciando con nombramientos de magistrados a la Corte de Constitucionalidad y Corte Suprema de Justicia que cumplan con el artículo 113 Constitucional de idoneidad, capacidad y honradez.

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