Lista Engel: ¿O de enemigos ideológicamente no alineados?

Kidon

La semana pasada se publicó por parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, una lista de supuestos actores corruptos y antidemocráticos de Guatemala, El Salvador y Honduras. En el caso de Guatemala, se incluyen a diferentes funcionarios públicos de los tres organismos del Estado, pero también a tres personajes particulares que nunca hemos ejercido la función pública y por ende pago alguno. 

Me refiero a Ricardo Méndez Ruiz Valdés, Moisés Galindo Ruiz y su servidor, quienes “casualmente pertenecemos a la Fundación Contra el Terrorismo”, una entidad con personería jurídica propia que ha sido pionera en la defensa del Estado, su soberanía, así como en la defensa de las garantías individuales de los veteranos de guerra, injusta e ilegalmente detenidos por parte de la izquierda radical y sus fiscales y jueces ideológicamente afines. 

Aunque el espíritu de cualquier lista es perseguir o sancionar a los funcionarios públicos que se fondean con dinero del Estado, no a simples particulares que generamos nuestras ganancias derivado de la prestación de servicios profesionales en forma privada, fuimos incluidos en dicha lista por el altísimo honor de ejercer una defensa pro-bono en favor de nuestros héroes de guerra.

Sin embargo, usted no encontrará en la lista por ejemplo a la ex fiscal Thelma Aldana, responsable de haberse recetado más de treinta y cinco millones de quetzales con la compra de un edificio inservible, o de haber contratado al ex decano Bonilla en una plaza fantasma, así como de haber recibido una dádiva de doscientos cincuenta mil dólares de los Estados Unidos de América en su cuenta personal.

Tampoco encontrará al jefe de la FECI Juan Francisco Sandoval Alfaro, sindicado de haber condonado a la entidad brasileña Odebrecht, al pago de más de trescientos ochenta y cuatro millones de dólares de los Estados Unidos de América, o a la ex secretaria general del MP Mayra Véliz, acusada de facilitar pasaportes guatemaltecos a extranjeros en su mayoría terroristas islámicos, como tampoco a los jueces de la impunidad Iris Jazmín Barrios, Erika Aifán, Miguel Ángel Gálvez y Pablo Xitumul, responsables de recibir sobre sueldos encubiertos como premios.

O, a los ex Magistrados de la CC, Gloria Porras, María Cristina Fernández García y el aún Magistrado Francisco de Mata Vela, participes de la desestabilización nacional y consecuentemente de la crisis económica que afecta al país, derivado de los múltiples fallos ilegales emitidos y que generaron una de las más grandes fugas de migrantes hacia el cuadrado del norte.

Y desde luego, no aparecerán usurpadores de propiedad y ladrones de energía eléctrica, terroristas pasados y presentes, abortistas y drogadictos, vagos bochincheros, defensores de la ideología de genero, ateos, destructores de la fe cristiana y de la familia, comunistas en sus distintas modalidades, oenegeros, pedófilos, manipuladores de la información pública, tibios y demás vende patrias, en sí, el lumpen social.

Por ello, la inclusión de la FCT en la lista de enemigos ideológicamente no alineados no es más que una alta condecoración que aceptamos, y que nos congratula sobremanera que el Departamento de Estado de esa potencia mundial, nos considere como una amenaza latente y una férrea oposición para instaurar en el país sus perversas y degradantes prácticas.

De lo que estoy seguro es, que por más listados o sanciones de visas que nos dediquen, seguiremos con mayor ímpetu velando por el estricto cumplimiento de la ley, la defensa de la soberanía nacional, la no intromisión, la liberación de nuestros veteranos de guerra y desde luego, de los valores del ser humano como lo son, la fe cristiana, la familia, la vida, la libertad, y la propiedad. 

“…Si mañana tu suelo sagrado lo amenaza invasión extranjera, libre al viento tu hermosa bandera, a vencer o a morir llamará…”

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