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Día Mundial del Agua

Tanmi Tnam

El agua es un componente natural que tiene vida para dar vida a todos los demás seres vivos. No puede existir la humanidad sin el agua.

Los pueblos del mundo deben apreciar, respetar y conservar el agua para garantizar la vida de todos y evitar conflictos y muerte. La Organización de las Naciones Unidas ha establecido el 22 de marzo de cada año como el Día Mundial del Agua. En este día, la población debería detenerse un momento para reflexionar sobre el estado en que se encuentra el vital líquido en la comunidad local, en el municipio y en todo el país, cómo se ha conservado por parte de las familias, instituciones públicas y privadas y qué acciones humanas están en contra de la vida del agua.

Este día y todos los que vienen, es necesario revisar el pensamiento y las actividades culturales que están a favor y en contra de la existencia del agua, revisar las prácticas que las personas tienen para acumular dinero con el uso excesivo del agua y cualquier otra acción que tiende al consumo irracional que nos lleve a un tiempo donde disminuya el agua de manera crítica. La falta de agua es muerte segura.

Muchas expresiones del modelo de desarrollo en curso en la mayoría de cabeceras municipales y ciudades simplemente reflejan la contaminación del agua de los ríos con la mayoría de aguas residuales que generalmente llegan a dar a los torrentes y las grandes extensiones de cultivos pertenecientes a una sola persona o empresa que hacen uso desmedido de las aguas de los ríos o de las aguas subterráneas. Con simple observación en distintos municipios del interior de la República, es posible encontrar transporte con grandes cantidades de madera y de leña que día tras día son acciones que invitan a pensar en cómo estarán dejando los lugares de dónde la tala de árboles es exagerada.

Así encontramos un panorama desolador, triste, abandonado y con pocas expresiones de vida debido a la contaminación, desvío de ríos, uso desmedido de químicos y falta de preocupación de las autoridades por conservar la vida del agua. Quedan pocos bosques, está bajando el caudal del agua de los ríos y los nacimientos se están secando.

Ahora, cada vez surgen los conflictos locales por falta de agua. Hay sequía, el clima está variando cuyas consecuencias se observan en el descontrol de los cultivos, baja producción que lleva a la escasez de alimentos de muchas familias.  Hay quejas por parte de la población de la poca cantidad de agua que se tiene para el consumo familiar y además la calidad en muchos casos no siempre cumple con los requisitos para el consumo de las personas.

Los pueblos de Guatemala tenemos que aceptar que la vida de todos los seres vivos depende del agua que viene de las profundidades de la tierra, de los ríos o de la lluvia. El agua es de alta importancia para estas generaciones y las del futuro y entonces es obligación de autoridades de todos los niveles velar por la cantidad y calidad de agua en todos los rincones del país.

En Guatemala, se debe conocer la visión de los pueblos que hay acerca del agua, especialmente la visión de los pueblos originarios que tiene mucho que aportar al cuidado y conservación de distintos elementos naturales. Es necesario el reconocimiento de la vida del agua que realmente da vida a las personas y a todos los seres vivos. Esta visión genera conceptos y prácticas que pueden aportar a toda Guatemala y al mundo entero. Las familias, la escuela de todos los niveles, las instituciones oficiales y privadas, instituciones religiosas y demás grupos deben asumir acciones que propicien conservar la vida del agua para todos.

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