Costa Rica: contrapuntos del traspaso de poderes
Sueños…
El domingo 8 de mayo, se realizó el cambio de poderes en Costa Rica. Es un país ejemplar por sus resultados de estabilidad social, económica, política y de relativa convivencia con la naturaleza. Como ejemplo es importante estudiar las características del momento actual de esta pequeña y entusiasta nación. ¿Puede ser ejemplo para los cambios necesarios en el resto de los países del istmo?, el cambio de poderes es una realidad o solamente un maquillaje, en medio del caos mundial podrá Costa Rica mantener su presencia como país pequeño y progresista. ¿Hasta dónde el nuevo gobierno tendrá espacios para continuar el cambio?, sí Costa Rica se moderniza, Centroamérica terminará más fragmentada de lo que ha estado siempre.
Son preguntas que surgen al observar el cambio de poderes de este mítico país. Y, es que para que los humanos podamos mantenernos como especie dominante en el planeta tenemos que cumplir dos equilibrios. Uno, generando una racionalidad social que nos permita vivir en grandes conglomerados sin agredirnos despiadadamente; dos, mantener nuestra convivencia con el resto de las especies de la naturaleza. Sí rompemos esos equilibrios el futuro para el conjunto de la vida en el planeta es irreversible y va, en pocas décadas, hacia el final, para convertir este paraíso en una roca de materia muerta.
Dice el historiador Juval Noah Harari, que los humanos para convivir tenemos que inventar relatos que al ser reconocidos por todos nos permiten vivir en grandes sociedades de individuos que no tienen nada en común, pero que se tragan los mitos y de esa manera soportan la vida en colectivo.
Cada nación tienes sus propias fábulas, creencias y mitos. Según el relato de Harari, en el siglo XX dominaron tres mitos, que competían entre sí, para explicar y ordenar el mundo. Para que el mundo tuviera un norte común. Marx decía que Francia era el país que marcaba las tendencias en el pensamiento social y político en los siglos XVIII y XIX, para Harari en el nuevo siglo fueron las capitales Nueva York, Londres, Berlín y Moscú las que formularon los grandes relatos que combatieron por la supremacía de organizar el mundo. Fueron el relato fascista, el relato comunista y el relato liberal.
El fascismo fue barrido en la segunda guerra mundial, lo que dio lugar al enfrentamiento de guerra fría, es decir, la batalla entre comunistas de Moscú y liberales por la hegemonía mundial, sin enfrentar directamente a los imperios, sino que estos ponían a otros a luchar, como pasó en América al sur del río Bravo. La presión de la competencia en los mercados y el cambio tecnológico derrumbó al socialismo, la caída del muro de Berlín marco su final desamparado.
Parecía que la historia terminaba y el liberalismo se imponía sin mácula. Pero, la realidad es cambiante y no existe final, siempre hay opción de mejorar o empeorar.
Nuestro autor, afirma que Homo sapiens conquistó el planeta por su capacidad para difundir mitos y utopías para mantener el orden social.” Somos los únicos mamíferos que podemos cooperar con numerosos extraños porque solo nosotros podemos inventar relatos de ficción, difundirlos y convencer a millones de personas para que crean en ellos.” Si convencemos a todos que los mitos son verdaderos, por la fuerza, las creencias o las razones, todos obedeceremos las mismas leyes y, por tanto, podremos cooperar de manera eficaz.
En esa línea la dirigencia costarricense muestra una vez más su capacidad de construir un mito realizable de orgullo nacional por la democracia. Todos los medios, todos los líderes celebran, ganando o perdiendo, el día de las elecciones como un día de fortaleza de la nación al realizar con libertad el acto electoral, y respetar sus resultados. Y, el día del cambio de poder, genera nuevas y legítimas muestras de orgullo nacional por el reconocimiento de la voluntad de la mayoría.
Y, en ese magnífico evento, se plantea la agenda del porvenir, o sea de los siguientes cuatro años. El jefe de la oposición, el presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias Sánchez le manifestó al nuevo presidente, «El pueblo depositó en usted su confianza para que emprenda una ruta transformadora de una nación que necesita modernizarse y de una economía que demanda recuperación y mayor simetría territorial de su desarrollo. No exagero en subrayarle que estamos frente a una emergencia nacional multisectorial que amenaza nuestra estabilidad y exige soluciones impostergables». Fiel reflejo de la madurez política de esta nación, reconocer el nuevo liderazgo y plantearle los problemas que el ciudadano percibe.
Es indiscutible el presagio de Arias: «La solidaridad patria que permea el espíritu de nuestro Estado Social de Derecho se encuentra al borde del agotamiento, agobiada por la desigualdad y falta de oportunidades y apremiada de mayor equidad e igualdad de género, con una institucionalidad que brinde mejor acceso a oportunidades de progreso social, familiar y personal». Es el reconocimiento de que la solidaridad patria no es solo papel y discursos, que la nueva forma de organización socioeconómica de este país se ha separado de su espíritu de solidaridad y equidad y ha evolucionado hacia sectores enormemente ricos (banqueros, exportadores/importadores, y clases rentistas profesionales e intelectuales), en contra de un 60% de la población que vive con el ingreso medio de subsistencia.
Pocas clases dominantes en el mundo tienen una visión de que el discurso de la igualdad y el derecho son fuentes de mantenimiento de la estabilidad de la nación.
La democracia se encuentra amenazada. Más de un millón de votantes se alejaron de las urnas desencantados y son el caldo de cultivo para la confrontación social. Tanto en lo social como en lo económico se acumulan problemas. Bajo el marco de una confrontación militar que utilice armas nucleares y el sombrío paisaje del calentamiento global.
La esencia de una democracia capitalista se expresa en la idea del consenso y el compromiso con los intereses de la nación, a despecho de los intereses de grupos corporativos. En algunos casos de América el ideal del compromiso es débil. Sí no existe la idea de hacer concesiones, la confrontación se hace permanente y diluye los vínculos sociales de un país.
«Como Presidente de la Asamblea Legislativa, comprometo la responsabilidad en mí depositada para ofrecerle un diálogo franco y constructivo frente a los grandes desafíos que le esperan al país durante su gestión», señaló.
La respuesta del nuevo presidente, Rodrigo Chaves, fue elocuente. El país necesita reformas y la nueva administración espera realizar cambios que sean evidentes a los ojos del país. Y, aquí está el gran desafío. Podrán las nuevas autoridades provocar los cambios indispensables para sacar a más del 20% de la población de la pobreza, evitar que el 60% de los ciudadanos no terminen el colegio, devolver la confianza a la población. El disenso es una de las variables del progreso, es reconocer que los demás pueden tener la razón y yo no. O que los demás tienen un punto de vista posible de ser verdadero. Ojalá que exista un nuevo amanecer para esta patria querida. Ojalá que Centroamérica por fin se levante y rompa con la realidad cantada por Pepe Batres: “Allí la serpiente sus roscas arrastra/colgada la vista del leve esquirol/en húmedo surco trazando su rastra/que nunca secaron los rayos del sol”

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