OpiniónColumnas

Hasta pronto Ingeniero Colom…

Lugar Hermenéutico

Pasadas las elecciones generales de 1999, por conducto de su hermano mayor, Antonio, tuve la oportunidad de conocer al Ingeniero Álvaro Colom, quién venía de ocupar un honroso tercer lugar, como candidato presidencial de aquel proceso, el mayor mérito electoral de la izquierda, en los años recientes, en Guatemala.

Con todo el ímpetu, de esa campaña, pero con la madurez del caso, el Ing. Colom, decide tomar distancia de los dos partidos que le postularon, URNG y DIA, para conformar un movimiento propio, al que denominaba EDI, Encuentro Democrático de Izquierda, al cual fueron invitados diversos personajes que ideológicamente se identifican con ello, sin embargo, como sucede hasta ahora, fue complejo avanzar con personas de ideas enraizadas en el conflicto armado interno, de a poco este grupo se fue disolviendo, enredado en dogmas ideológicos, hasta disolverse.

Tiempo después, con otras personas que no habían militado en política, así como otras de diferentes corrientes del espectro ideológico, desde las extintas, DC, MLN, PDCN, DIA, CAN, PR, FDNG, entre otras, se inicia el camino de la denominada “Unidad Nacional de la Esperanza”, UNE, con la cual, se postula para el proceso electoral del 2003, perdiendo en esta oportunidad el balotaje, con un estrecho margen.

En marzo de 2004, superada la goma electoral del anterior proceso, el Ing. Colom, me invita a trabajar en las oficinas de su empresa ubicada en zona 1, “Grupo Mega”, el tener de común denominador, la profesión de Ingenieros Industriales, permitió apoyarle en diversos temas, hasta que finalmente, en ese mismo año, la atención se volcó completamente al trabajo político del partido, convirtiendo la oficina en una especie de subsede.

En ese tiempo, se incorporan valiosas personalidades del extinto, Partido Socialista Democrático, PSD, destacando a Luis Zurita Tablada, Fernando Fuentes Mohr y Miguel Ángel Ibarra, quienes acompañan el proceso por medio del cual, la UNE, decide definirse ideológicamente con la Social Democracia, como norte que orienta su actuación política y potencial programa de gobierno.

Observando la afinidad con el equipo, el Ing. Colom, me delega hacerme cargo de la secretaria nacional de Juventud del Partido, de cara al proceso electoral del 2007, cargo que asumí con propiedad, suma humildad, logrando desarrollar una estructura de juventud a nivel nacional y un programa de gobierno que visibilizara las necesidades y expectativas de la juventud en aquel momento.

Como en todo, ello genero simpatía y por supuesto muchos anticuerpos, aún recuerdo una publicación de septiembre de 2007 de un diario nacional, días antes de la primera vuelta electoral, en la cual el Ing. Colom, me citaba como una de sus cuatro personas de confianza, a partir de ese me momento, empiezo a ser objeto de ataques, intrigas y el juego propio del quehacer político de una democracia subdesarrollada como en la que vivimos.

Durante el periodo de gobierno 2008-2012, fui tomado en cuenta para ocupar dos cargos durante su gestión, los cuales eran afines tanto a la experiencia laboral, como a los grados académicos acreditados en ese entonces, cargos que ejercí afín al programa general de gobierno, pero completamente separado de la acción política de la UNE, de la cual sigo desvinculado hasta la fecha.

Concluido el periodo de gobierno, por invitación del Dr. Olmedo España, entonces Vice-Rector Académico de la USAC, con un grupo de 20 docentes, iniciamos estudios de Doctorado en Ingeniería en España, con lo cual pongo punto final a mi efímero paso por el activismo político del país.

Por iniciativa propia, en 2017, busco nuevamente al Ing. Colom, fecha, desde la cual volvimos a retomar conversaciones periódicas, sin tema central, sin agenda, como cuando nos echábamos un trago con un buen tabaco en la sede de “Mega” en la zona 1, luego de largas jornadas de trabajo.

Por la crisis sanitaria de 2019, estuvimos en comunicación, solo por vía telefónica, hasta que, desde hace varios meses, dejó de contestar mis llamadas y mensajes.  Eterna gratitud, gracias por las enseñanzas, consejos y vivencias, siempre recordare su amplia cosmovisión de la vida para comprender contextos, a veces tan sencillos, a veces tan complejos, como lo es la realidad misma del país en que vivimos, algo que, sin duda, no se aprende en ninguna universidad, hasta pronto Ingeniero Colom…

Area de Opinión
Libre emisión de pensamiento.

Le invitamos a leer más del autor: