¡La cosa se está poniendo buena!

Pocos como el genial Gabriel García Márquez, pudieron resumir el genuino propósito de escribir.
Método, constancia, disciplina y tema, cuatro pilares fundamentales de esta tarea, cuatro motivaciones básicas, ausentes de la realidad chapina, o usurpadas por una jauría lejana de nosotros, “La Plebe”, el ríspido y lapidario pueblo.