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Creemos en la educación

Tanmi Tnam

Padres y madres de familia, docentes en servicio, críticos, politiqueros, estudiantes y teóricos les gusta opinar acerca de la educación puesto que es uno de los servicios públicos presente en la mayoría de comunidades rurales. Algunos halagan avances, otros señalan la ausencia de calidad y cobertura, otros con datos e información señalan que el modelo educativo ha caducado, otros escuchan avances solamente en discursos de autoridades y muchos dicen que peor es nada. En todo esto, hay que señalar la importancia de la educación.

Con los datos disponibles y el impacto de la educación escolar en la niñez y juventud, distintos sectores del país coinciden en la necesidad de transformar la educación para que responda a la identificación y solución de los problemas estructurales que padece nuestro país.  Un intento de transformación fue la Reforma Educativa que se trató de implementar como parte de los Acuerdos de Paz. Hubo discusión, diálogo y propuestas para tener un sistema educativo nacional que con base a valores de justicia, equidad, paz, interculturalidad, democracia y desarrollo fuera posible contar con una nueva imagen de Estado.

Transcurridos algunos años siguen las demandas de todo tipo: mejoras salariales de los trabajadores de la educación, diseño y construcción de edificios educativos, dotación de mobiliario decente, mejor presentación de los edificios escolares, construcción de áreas recreativas, mejora de la alimentación escolar y transparencia en su uso, dotación de equipo tecnológico para los aprendizajes y señal de Internet gratuito a todos los centros educativos del país.  También muchos sectores presentan demandas por mejorar la administración educativa y la del centro educativo, el currículo escolar en función de aprendizajes para la vida, la regionalización del currículo, los mejores instrumentos para el desarrollo curricular libres de injusticia, discriminación y racismo.

También hay señalamientos que apuntan a temas como el desplazamiento de la lengua materna de los pueblos originarios por el uso del español como único idioma del centro educativo y más el monolingüismo docente, falta de materiales educativos para el uso y fortalecimiento de los idiomas que se hablan en el país, que los egresados de la primaria dominan poco el idioma oficial, igual problema tienen los egresados del ciclo diversificado, que muchos aprendizajes no tienen uso en actividades de la cotidianidad.

Como la educación es un servicio que tiene importancia para todos, es necesario que las más altas autoridades del país y de la educación sepan escuchar las demandas acerca de los problemas y aspiraciones de los pueblos de Guatemala que con el apoyo de la educación escolar pueden contar con las soluciones a mediano y largo plazos.

Necesitamos una educación que asuma responsablemente el logro del perfil de los egresados con dominio de por lo menos tres idiomas, la historia verdadera de cada uno de los pueblos de Guatemala, la aplicación de los sistemas matemáticos a los problemas de la vida real, las artes que corresponden a cada pueblo, conocer las distintas visiones acerca de la realidad y de la vida, fortalecer las relaciones con la Madre Tierra, respetar los elementos naturales que conservan la vida de todos, fomentar la cultura de paz, insistir en la construcción de la interculturalidad y propiciar el acercamiento y la vivencia del concepto de desarrollo que propicie el fortalecimiento de las relaciones de la persona con el entorno. Queremos una educación cuyos conocimientos asuman la integralidad de la vida para la salud de todos.

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