Cena política
Petardo
Me invitaron a una cena un grupo de amigos, en un restaurante, donde se cuidaron de apartar un salón discreto. Asistimos personas como si fuera un fiambre, todos mayores de edad, profesionales y no profesionales, mujeres y hombres, pero sin compromiso de pareja. Solo se sentía el aroma de perfume femenino, que cambio cuando surgieron los alimentos y el aroma de café.
Ninguno de los presentes quisimos la cabecera. Una de las presentes salió con el tema de que nos parecían los candidatos presidenciables de Guatemala, surgió un silencio que uno de los presentes hablo y respondió que a todos los candidatos debían de meterlos en una licuadora para marcar en la papeleta de votación y marcar con el color que saldría de la licuadora. Otro respondió entrando a mas fondo de la pregunta diciendo que debiese de recordar, Las elecciones son un proceso institucional en el que los electores eligen con su voto, entre una pluralidad de candidatos a quienes ocuparán los cargos políticos en una democracia representativa.
Desafortunadamente en Guatemala no podemos hablar de un país democrático. En el plano internacional, resulta necesario resaltar que, en casi todos los países, como parte de su sistema democrático, podemos encontrar la existencia de instituciones político-electorales, que se encargan, tanto de organizar las elecciones, desafortunadamente en Guatemala no se confía en esta organización.
Otro de los presentes dijo que debíamos de saber que Finlandia fue la primera nación en el mundo en dar a todos los ciudadanos un sufragio total, en otras palabras, el derecho a votar. Nueva Zelanda fue el segundo país en el mundo en otorgar a sus ciudadanos el derecho a votar, en 1893. Mediante el sistema de voto cantado el votante debía presentarse a la mesa electoral y pronunciar de viva voz el candidato de su preferencia, siendo anotado su voto en una planilla por la autoridad electoral y que así debería de hacerse en Guatemala para tener credibilidad. Otro pregunto si sabíamos que se planeaba un fraude electoral en Guatemala. Otro respondió que estábamos caminando en un lugar pantanoso, ya que en Guatemala sobresale la corrupción y que esto favorece al fraude.
Las formas de corrupción varían, pero las más comunes son el uso ilegítimo de información privilegiada y el patrocinio; además de los sobornos, el tráfico de influencias, la evasión fiscal, las extorsiones, los fraudes, la malversación, la prevaricación, el caciquismo, el compadrazgo, la cooptación, el nepotismo, la impunidad y el despotismo. La corrupción facilita a menudo otro tipo de hechos criminales como el narcotráfico, el lavado de dinero, la prostitución ilegal y la trata de personas, aunque por cierto no se restringe a estos crímenes organizados y no siempre apoya o protege otros crímenes.
Llego el momento del postre, finalizando la cena y la plática interesante, donde se notó que ninguno de los presentes estábamos convencido por quién votar en estas selecciones que están próximas a llegar. En todos se notó una desconfianza total de las autoridades que participaron para llegar a las selecciones de los candidatos, como lo es el poder legislativo, ejecutivo y judicial que con sus actuaciones no convencen a muchos guatemaltecos sobre las próximas elecciones. Uno de ellos para finalizar dijo, aunque estoy anciano no van a comprar mi voto a través del dinero que se les da a los de la tercera edad, otro dijo, aunque no tengo con mi familia mucho que comer no compraran mi voto con una bolsa solidaria y mi canasta básica, otros de los presentes dijo, aunque me están extorsionando no votare por el que ofrece hacer más cárceles que escuelas. Ya para retirarnos nos despedimos para volvernos a reunir posiblemente en menos de cuatro años para hablar sobre el tema.

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