Ética, honestidad y honorabilidad
Debemos Saber La Verdad
En muchos países, la ética, la honestidad y honorabilidad parecen un movimiento subversivo porque el ser éticos y honestos para muchos poíticos es una mancha al sistema político.
La ética, honestidad y honrabilidad han permitido resultados extraordinarios porque son las mejores tendencias bajo el punto de vista personal, corporativo y empresarial que sobreviven en los mercados altamente competitivos, en los trabajos, en los servicios, en los precios y en las calidades.
Las personas y empresas más exitosas tomando como lo principal la ética, la honestidad y la honorabilidad son las que no engañan al consumidor, a sus trabajadores, a sus gerentes, a nadie.
Mucha gente dicen ser éticos, honrados y honorables, pero cuesta mucho disculpar a personas que personalmente no robaron, pero que permitieron robar a su gente. Esto es algo intolerable que no se puede permitir.
Una metáfora: una gallina encontró un huevo de águila que se lo llevo y lo empollo. Nació un aguilucho, la mamá gallina le decia siempre que era gallina. Paso el tiempo el aguilucho siempre picoteó el piso, y cuando se convirtió en águila un día vio hacia arriba un águila y pregunto a mamá gallina, que es. La mamá gallina le dijo es la reina del cielo, sus horizontes son el infinito, es la a reina de todas las aves y le dijo tu olvídate de ella, tu naciste para ser gallina. Nuestra águila se murió vieja creyendo que era gallina.
El ser ético, honesto y honorable es para las águilas. Los que no son éticos, ni honestos, ni honorables son gallinas que toda su vida tendrán que tragar lombrices y seguirán picoteando en el piso.
Lo peor que podemos hacer los padres es convertir en gallinas a los hijos, si lo hacemos estarán listos para que sean corruptos, estarán listos para robar y para ser oportunistas.
Solamente las almas grandes y generosas se atreven a aspirar a grandes ideales de ética, honestidad y honorabilidad, que son principios de gallardía que le dan una señoría al ser humano, así vemos que la ética, honestidad y honorabilidad no están hechas para mediocres.
Los gutemaltecos debemos ser éticos, honestos y honorables, para no seguir siendo un pueblo complaciente que acepta todo y no se esfuerza por mejorar.
No hay que aceptar que a los delincuentes menores de edad se les trate como niños y niñas inocentes, lo que solo sirve para crear peligrosos delincuentes, sin ética, sin honestidad, ni honorabilidad.
Aún cuando dicen que son éticos, honestos y honorables, se han utilizado los derechos humanos para defender delincuentes, asesinos y personas que incumplen las leyes y a funcionarios corruptos, deshonestos y no honorables.
Guatemala es un país que se sigue desmoronando porque hemos aceptado que haya políticos, funcionarios públicos, líderes populares y organizaciones sociales, tan irresponsables que nos siguen robando, nos atropellan y a pesar de todo, mucha gente los sigue como borregos. Con todo esto muchos guatemaltecos están pidiendo que es hora de reaccionar y que ya no nos dejemos maltratar más.
Tenemos una crisis económica por los desaciertos, corrupción, irresponsabilidad falta de ética, falta de moral y falta de honorabilidad de los últimos gobiernos, (incluyendo el actual) que han permitido que se perdiera la disciplina fiscal, la credibilidad en los funcionarios, endeudaron al país, subieron los gastos de gobierno y compraron la voluntad de mucha gente.
Guatemala no saldrá adelante solo con procesos electorales con tantos candidatos, muchos cuestionados jurídicamente, otros que han demostrado que han trabajado solo por sus intereses, muchos otros que juegan con las leyes y son muy pocos los que si tienen interés de actuar por el bien de Guatemala y por los guatemaltecos.
Guatemala necesita que los guatemaltecos seamos éticos, honestos y honorables, actuemos para lograr verdaderas reformas legales y que funcione la justicia, para combatir la corrupción y establecer la forma de manejar ética, honesta y honorablemente los fondos públicos con transparencia, para tener auditorías reales, para la aplicación rápida de las leyes a todos por igual, para cambios sociales y económicos y así lograr verdaderamente descentralizar el país, y para poder tener verdaderos líderes políticos que sean éticos, honestos y honorables.
Muchas personas dicen que son éticos, honestos y honorables, pero aún cuando no lo son, para que las aceptan mienten y engañan para que haya relación con otras personas.
Podríamos vivir en paz y superarnos todos, si todos aceptaramos lo que realmente es ser éticos, honestos y honorables, para que nos respetemos unos a otros y se evitaría la incomprensión, la desconfianza y el odio.
No todos somos iguales, porque el día que dejemos de ser diferentes o desinteresados, nos manipularían.
Si todos los guatemaltecos fuéramos éticos, honestos y honorables podríamos demostrar la unidad, para exigir a los funcionarios electos y nombrados, qué sin propaganda demagógica, den a conocer públicamente sus actuaciones en forma abierta y transparente, utilizando las leyes y el uso del dinero de los guatemaltecos, que son los impuestos.
No hay que preguntarse que se va a heredar a los hijos, hay que preguntarse qué hijos se le van a dejar a la nación.
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