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La energía del ser humano (Parte VII)

Una vez los seres humanos hemos adquirido la suficiente energía, estamos preparados para comprometernos reflexivamente con la evolución espiritual, con esta nueva posición podemos hacer que empiecen a fluir las revelaciones y coincidencias que nos impulsan hacia el futuro y, es así, como cada ser humano se incorpora conscientemente a su propia evolución.

Desde esta perspectiva, la evolución de cada ser humano consciente consiste en:

  • Se acumula la energía suficiente;
  • Se explica el problema básico de la vida por la energía que le legaron los padres, este conocimiento aporta el contexto completo para la propia intuición desde las revelaciones, la evolución espiritual del ser;
  • Se concentra en los otros problemas inmediatos, los que enfrentan en la vida cotidiana, éstos siempre están relacionados con la percepción más importante, la que define en qué punto se encuentra la indagación que durante toda la vida se llevara a efecto;
  • Una vez consciente de los problemas, se recibirá una forma de dirección intuitiva sobre lo qué se debe hacer y hacia dónde dirigirse;
  • Si se han identificado las preguntas adecuadas, las respuestas llegaran siempre, es difícil identificar las preguntas fundamentales y efectivas, pero debe hacerse;
  • Una vez se tiene la intuición de lo que puede ocurrir, lo siguiente es mantenerse alerta y despierto, ya que tarde o temprano se producirán otras revelaciones y coincidencias que empujarán en la dirección indicada por la intuición;
  • La energía que fluye internamente produce una corriente que a su vez induce más energía, la cual no se agotara;
  • Cada ser debe integrar todas las visiones en una forma única;

Toda vez que alcanzamos la meta anterior debemos ayudar a otros para que nos den las respuestas que deseamos, en base a una ética de respeto, la cual debe regir la forma en que tratarnos a los humanos y de esa manera facilitamos la evolución de todos. Los otros seres humanos y los lugares que tienen respuestas para cada uno nos parecerán más atractivos y luminosos, en tanto, las revelaciones nos los muestren.

Las intuiciones pueden presentarse en forma de sueños y para interpretarlas debemos comparar la trama de este con la historia de nuestra vida. Los sueños nos pueden mostrar hechos relacionados a nuestras vidas en los cuales no habíamos reparado.  Además de los sueños, las ilusiones, las fantasías y los ensueños pueden guiarnos. Por todo lo anterior, debemos estar atentos para visualizar cualquier cambio que se avecine en nuestras vidas.

Cuando tenemos un pensamiento intuitivo debemos preguntarnos el motivo de por qué lo tenemos, por qué en ese momento y cómo se relaciona con los problemas de mi vida; todo en forma de observadores y así nos colocamos en la corriente de evolución.

Los pensamientos negativos hay que rechazarlos cuando aparecen. Luego aparecerán imágenes o pensamientos de consecuencias positivas, los cuales se impondrán en nuestra mente. Con el tiempo, los pensamientos negativos tienden a desaparecer. Sin embargo, hay que recordar que las intuiciones se refieren a cosas positivas, pero si las imágenes negativas persisten, deben ser tomadas en cuenta, pero no seguirlas.

Con esta construcción, la energía vibratoria, todas las respuestas vienen a nosotros en forma misteriosa y, en algunos casos, otros humanos, inesperadamente, nos proporcionan las respuestas a nuestras interrogantes. Sin embrago, no todos los humanos tienen la energía para dar o transmitir algún mensaje.

Debemos concentrarnos en la belleza de un ser humano para transmitir energía y cuando la energía entra en ese individuo, se le ayuda a ver su propia verdad, entonces, la persona podrá trasmitir su verdad y nueva energía.

Si nos hacemos a un lado del Creador y pretendemos evolucionar espiritualmente excluyéndolo de la naturaleza y del universo incitamos a los demás seres humanos a la desunión, al desorden y al egoísmo.

Los humanos debemos tener presente los problemas y ver las revelaciones y coincidencias de manera retrospectiva, esa forma nos permitirá ser capaces de ver las respuestas a medida que se producen y así se fortalece la experiencia de cada día. Todo acontecimiento tiene un significado y contiene un mensaje para cada uno, incluso en los casos que consideramos perjudiciales, pero nuestro reto es encontrar el lado positivo y posible de cada acontecimiento por negativo que sea.

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