Uno en Dos Capítulo 6 (2a. Parte)
La Organización (2ª. parte)
Le conté a mi amigo el Licenciado y me dijo que por su lado ya habían escuchado que algo estaba pasando de boca en boca en las oficinas de Gobierno, uno de los abogados que trabaja con él, es quien ha escuchado esos rumores y él ya se lo había informado al resto de los de la Organización, quienes también ya habían escuchado algo al respecto. No encontraba la manera de localizar al Presidente, no quería salir y cuando salía lo cubrían con sombrillas aunque no estuviese lloviendo. Unos días más tarde se supo que venía un alto funcionario del país del norte para sostener unas pláticas con el Gobierno, la oportunidad que yo había estado esperando ya que la prensa estaría presente ya eran tratados entre los dos países, ese día la prensa ya estaba situada en sus lugares con las cámaras y los reporteros con sus grabadoras en mano a modo de no perder una palabra, se saludaron con el Presidente y este personaje saludo al Ministro de Agricultura y el de Gobernación ya que la ayuda era para esos dos ministerios, charlaron y firmaron unos acuerdos y en ese momento entre en la mente del Presidente invitando a la prensa para una charla con el Pueblo ya que tenía bastante que informarles y que la fecha para este evento no pasaría de dos semanas, todavía en la mente del Presidente participe en la celebración con una copa de champagne en la mano y salí de su mente, ya el mensaje estaba grabado y en la mentes de quienes estaban observando las noticias. Los comentaristas en las cámaras de televisión comentando, al respecto de lo que habían sido rumores de una charla con el pueblo.
Mi señora me felicito y le dije que abriésemos una botella de vino ya que era una ocasión para nosotros también celebrar, nos la terminamos y lo poco que había quedado se lo llevo ella a la cocina para guardarlo en la refrigeradora, se terminó el día para mí y le dije que si quería seguir escuchando que lo hiciera ya que yo me quería dormir, el teléfono sonó y cabal el número del Licenciado apareció le conteste y el preguntándome si el norteño habría obligado a que el Presidente tomase esa decisión de charlar con el Pueblo, yo le contesté que como le había dicho antes esos paisanos que viven en el norte tienen mucha influencia a todo nivel, el me comento que ya estaban todos los auditores, y abogados terminando los planes de cómo iban a actuar para lo que pasara después de la Charla con el Pueblo, nos despedimos y me fui a dormir.
Al día siguiente en las noticias por televisión y la prensa escrita en los encabezados de estas, unas decían fecha pendiente de la Charla con el Pueblo, en otras, sin confirmar la fecha de la Charla con el Pueblo, otras, Puntos a tratar en la Charla con el Pueblo, ya no habría nada que pudiese detener la euforia de la Charla, ya era solo cuestión de esperar a que el Presidente diera el día y la hora. Al día siguiente me desperté y me puse un par de pants y una camisa para hacer algo de ejercicio, fui a la cocina, me serví un vaso de jugo de naranja y me fui a pedalear un poco en la bicicleta estacionaria y leer los encabezados de el periódico, al rato llego mi señora a decirme que el desayuno estaba servido, desayunamos y después me vestí y me fui a la oficina, al llegar, varios de los compañeros de trabajo preguntándome acerca de lo que el Presidente podría decir en esa Charla con el Pueblo, yo solo les dije que creía que él se iba a confesar con el pueblo y tratar de cambiar el rumbo del futuro de la nación, uno de ellos dijo que lo más probable era que nos seguiría mintiendo, yo le dije que se recordara lo que el ministro de Gobernación había dicho, que esta charla tendría a la prensa y los telenoticieros presentes y que él iba a poner en blanco y negro y firmar todo lo dicho, todos se quedaron charlando mientras yo me retire a mi oficina, la señora que limpia y sirve el café me ofreció una taza la cual acepte, llame al Licenciado y este me dijo que no sabía, como este Presidente y su ministro de Gobernación el de Relaciones Públicas de la Presidencia saldrían de este embrollo, me pregunto que cuales serían los pasos a seguir, yo le dije que no sabría nada hasta después de la charla ya que el grupo del norte mandará un par de ellos y ellos se comunicaran con nosotros por medio del socio de la Fundación. Él me dijo que los del conglomerado me querían conocer, le dije que mejor todo lo hiciésemos como hasta ahora, el socio con los del Norte y nosotros solo los dos, le dije que más tarde tendríamos la oportunidad, sin embargo le dije que si quería almorzar nos podríamos juntar donde mis sobrinos a lo que me respondió era una excelente idea ya que tenía tiempo y quería relajarse un poco platicando conmigo, le dije que reservara y me llamase para ver la hora del almuerzo, quedamos en eso y me dijo que solo arreglaría unos casos que tenía pendientes pero que no sería más tarde de la una, le respondí que allí estaría yo.
Llame a mi esposa para informarle que no iría a la casa a almorzar y me pregunto si iba a ir a almorzar donde los sobrinos y le dije que si a lo cual me dijo que le llevase uno de sus platos favoritos. Antes de salir de la oficina los muchachos ya habían puesto en una pizarra que usamos para los apuntes de lo que se hará durante ese día, ya habían apuntado los posibles escenarios de la Charla, me preguntaron que por cuál de ellos me inclinaría y marque en lo que ellos habían apuntado como número tres, el cual, en mayúsculas, al igual que los otros, habían escrito CONFESIÓN.
Al llegar al restaurante, le pregunte al mesero que me salió a recibir y saludar que a dónde me iba sentar, este me respondió que, en la mesa pegado al jardín, esta era un poco más alejada del resto y nos dirigimos a ella. Le pedí un Tequila obscuro y una Seven Up fría, a veces me gusta la temperatura de la mezcla sin hielo, le siento más sabor. En el segundo sorbo llego el Licenciado, nos saludamos y vio lo que yo había ordenado y le dijo al mesero que quería uno igual al que yo estaba degustando, me conto acerca del entusiasmo de la gente en su oficina al respecto de la Charla con el Pueblo, y le conté que en la mía ya tenían posibles temas apuntados y que creía que ya habían apuestas, le pregunte si en algún artículo de nuestra Constitución existe algo al respecto del poder del pueblo, me contesto que sí, que en Latinoamérica nuestro país era uno de los pocos, pero que tendría que recordarse ya que creía que era algo así como el ciento cincuenta o mas pero que llamaría a la oficina para confirmar, tomo su celular y llamo, y me dijo que me pasarían la información por correo electrónico, antes de pedir el segundo tequila ordenamos un plato de tres distintos Patees que los sirven con cebolla picada y perejil y mostaza acompañados de unos panes que lo hacen una de las entradas que a mucha gente les gusta.
Me dijo que sus colaboradores en la oficina le cuentan que en las oficinas que visitan hay una sensación como cuando le dicen a uno que va a haber un terremoto, todo el mundo esperando la fecha y lo que el Presidente y su gabinete tendrán que de decir en tan esperada Charla con el Pueblo. Pedimos un almuerzo liviano y lo degustamos, al terminarlo llego un amigo del Licenciado y nos preguntó si nos podía acompañar, ya que le habían quedado mal y que había tenido que almorzar solo, pero que tenía ganas de tomarse un par de tragos y que mejor con esta compañía y se dirigió a mí y me pregunto si yo estaría de acuerdo en permitir la intromisión, y le dije que de ninguna manera que era bienvenido y nos presentamos y saludamos, nos preguntó qué era lo que estábamos tomando y le dijimos lo que estábamos tomando lo cual era una mezcla de tequila añejado con Seven Up, cuando llego el mesero de una vez le dije que me apartara un plato de carne para llevarle a mi señora y que lo acompañaran con lo que a ella le gusta, el Licenciado le pregunto a su amigo que si él sabía algo al respecto de lo que el Presidente tenía en mente para la plática que daría, el respondió que lo único que él creía era que era serio ya que la Charla iba esta estar notariada y aparte en vivo con la prensa y los telenoticieros presentes, que él lo miraba como un suicidio político, estuvimos de acuerdo, eran ya las cuatro y media de la tarde cuando llame al mesero para que me preparara el plato que le llevaría a mi esposa, cupo otra ronda de bebidas las cuales todas las pago el amigo del Licenciado y este pago mi almuerzo, lo disfrutamos y nos despedimos al terminar la ronda.
Mi esposa se terminó su cena y me dijo que había un programa que quería ver y se fue al cuarto, yo me fui al estudio a ver las noticias, en uno de los canales, uno de los presentadores había entrevistado al vocero de la presidencia y que este le había dicho que la Charla del Presidente se llevaría a cabo el sábado siguiente ya que para este sería muy prematuro, ya que siendo jueves en dos días no se podía montar todo el sistema de sonido y lo que conlleva sentar unas dos pantallas para la transmisión en vivo de la charla, que la invitación seria para las doce treinta para darle chance a los que trabajan los sábados de poder llegar o por lo menos que lo fueran escuchando en la radio hasta llegar al parque central, que será donde se realice la charla, llame al Licenciado y me dijo que alguien del consorcio ya lo había llamado y lo estaba viendo, nos despedimos y le dije que teníamos una semana y un par de días más para estar listos. Ese fin de semana y los consiguientes días pasaron muy lentamente, sin embargo, yo tuve suficiente tiempo para hacer suficientes notas de lo que el Presidente y yo íbamos a decir. En los diarios y noticieros del martes de la siguiente semana ya se miraba en los encabezados de los diarios, fotos del trabajo que se estaba realizando por los encargados de la colocación de las pantallas y los equipos de sonido en los siguientes días.
Yo repasando las notas para no fallar en nada, después del saludo entraría en su mente y de allí en adelante pasarle al pueblo lo que sería este gobierno, de este día para lo que le queda del periodo presidencial y dejar las recomendaciones para lo que podría ser la continuación de lo que se cambiara este día para un mejor futuro del país. En uno de esos días le pregunte a mi señora lo que pensaba con respecto a lo que el Presidente iba a decir, lentamente leyó la charla que daría él y me dijo que después de esta confesión, estaría cometiendo un suicidio ya sea un suicidio político o posiblemente otra clase de suicidio ya que la mayoría de funcionarios públicos del gobierno están involucrados en actos ilícitos en contubernio con varios personajes de la empresa privada, que ella creía que no sería tan seguro para el salir solo a pasearse en el parque, nos reímos y llegamos a la conclusión que tal vez sería mejor hospitalizarse afuera del país mientras el equipo de auditoría termina con él. Finalmente llego el sábado, siendo las doce del mediodía yo ya tenía las tres televisiones encendidas y esperando que diesen las doce treinta, mi señora ya había preparado unos sándwiches y una limonada, me comí uno solo porque ya estaban hechos, ella me dijo que eran para después de la charla, sería uno menos de los que me iba a comer después, cabal a las doce treinta llego el Presidente.
Continuará…
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