Ciencia para la paz y el desarrollo
Tanmi Tnam
La Organización de las Naciones Unidas señaló desde el año 2002 que el día 10 de noviembre de cada año sea el Día Mundial de la Ciencia para el Desarrollo y la Paz con el objetivo de reflexionar sobre los usos y beneficios de la ciencia para la humanidad. En este sentido, es necesario que todos cuenten con alguna información de los grandes avances de la ciencia y sus aportes para alcanzar la paz y el desarrollo de todos. Estamos convencidos que necesitamos un mundo donde se viva la equidad y asegurar el bienestar para las generaciones que siguen.
La ciencia ha servido y sirve para comprender la vida y el mundo, proporciona información sobre cómo funcionan y para qué sirven los objetos y los hechos que vemos. Hay que reconocer y alegrarse de los aportes de la ciencia a la salud, a la economía, a la política y al estudio de los pueblos. Pero también hay que conocer los aportes que de alguna manera han sido el soporte para la destrucción de la vida de las personas y el maltrato al medio ambiente.
Muchos autores en distintas partes del mundo consideran que las ciencias deben aportar más conocimientos para disminuir y eliminar la pobreza que padece la mayoría de la población mundial que sufre hambre, desnutrición, enfermedades y muerte. Las ciencias deben de aportar suficientemente para la construcción de la paz y evitar miles de muertes donde hay conflictos por cualquier motivo. Los conocimientos y la tecnología que genera la ciencia deben ser del conocimiento de la humanidad y hacer del conocimiento de todos qué hechos ponen en peligro la vida de la humanidad y del planeta tierra. Una ciencia que entienda el pueblo y científicos que aman la vida de la humanidad y de la tierra.
Las instituciones especializadas para el crecimiento de las ciencias deben de seguir haciendo investigaciones para averiguar y hacer del conocimiento de los pueblos de los efectos que no siempre han favorecido a la vida de todos. Es necesario fomentar la investigación para tener más respuestas y soluciones a los grandes problemas políticos y económicos que padece el mundo actual. No queremos conflictos, queremos vivir en paz. Es necesario que la ciencia no se incline solamente por el dinero ni por el poder porque pierde importancia para la mayoría de la población. Es necesario hacer investigaciones sobre cómo otros pueblos han interpretado la vida de las personas, de los pueblos y la del planeta tierra.
La ciencia debe ayudar a los pueblos del mundo sobre cómo conservar los elementos naturales que sirven para mantener la vida de las generaciones actuales, pero sin destruir todo porque es necesario dejar lo que vemos para que sirvan a la vida de las generaciones que siguen. Es necesario conocer la vida de los pueblos que cuentan con otras prácticas que actúan con base al equilibrio que debe de haber para conservar todo lo útil para la vida. En el mundo actual hay otros modelos de vida, hay muchas experiencias que vale conocerlas, particularmente los que aman la vida de los pueblos y la de los elementos de la naturaleza.
La Organización de las Naciones Unidas ha señalado que durante los años 2024 al 2033 sea el Decenio Internacional de las ciencias para el desarrollo sostenible. Este tiempo ofrece múltiples oportunidades para que todos conozcan la importancia de las ciencias para la paz y el desarrollo. De esta manera, la escuela de todos los niveles, las organizaciones de los pueblos deben buscar momentos para reflexionar sobre los aportes de las ciencias para el bienestar de la humanidad y del planeta tierra, especialmente para el futuro.

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