
Sobrevivirá Centroamérica al ataque de aranceles 2025
Atacar los datos es señal de debilidad estratégica
Siempre me preguntan por qué utilizo datos del FMI, el Banco Mundial, los bancos centrales y otros organismos oficiales del capitalismo para argumentar mis puntos de vista sobre la situación económica internacional. Bueno, en primer lugar, estas instituciones organizan de mejor y más creíble forma los datos reales. En segundo, algunos afirman que no soy revolucionario por presentar los datos de esa manera. Y tienen razón, no soy revolucionario. Revolucionario es alguien que transforma, que cambia, que modifica los hechos o las ideas, ya sea en forma progresista o conservadora. Ya sea para avanzar o para retroceder. Yo, como muchos que se autoproclaman revolucionarios no lo somos, no hemos cambiado nada. A veces ni siquiera un foco de la casa en que vivimos.
Lo único que quiero es mostrar con datos generales difíciles de refutar de la estadística más confiable y de las declaraciones de los hombres de ciencia económica, un cuadro de conjunto de la economía mundial capitalista en sus relaciones internacionales, a comienzos del siglo XXI, y de por qué con los avances en el consumo y la renta mundial per cápita no se alcanza ni el bienestar, ni la paz, ni la confianza entre los seres humanos y por qué seguimos el rumbo de destruir el planeta y al resto de seres vivos.
Los datos nos muestran que el auge de la tecnología, las comunicaciones y el consumo siempre estarán acompañados de la pobreza, las guerras y el exterminio de etnias y grupos humanos condenados de antemano al exterminio. Hoy, toda guerra es imperialista, o sea de conquista, exterminio humano y ambiental y robo. En general, las guerras siguen siendo luchas por el reparto del mundo, por la redistribución de las colonias y semicolonias. Hay 8 potencias, el resto o somos colonias o semicolonias. El corazón del sistema que representa el origen de todos los problemas es el control del sistema financiero mundial. Sistema circulatorio del capitalismo, el sistema más productivo, competitivo y dinámico jamás soñado por el ser humano, su creador.
El istmo ante cambios irreversibles del mundo
Económicamente, la región sobrevive, ha logrado resistir las fuertes confrontaciones geopolíticas de la segunda década del siglo. Políticamente, no existen liderazgos con visión de estadistas que puedan diseñar y conducir en la práctica proyectos de fortalecimiento de Estados democráticos, unidos, honrados, no corruptos. Ambientalmente, solo en los discursos hay visiones de protección del ambiente.
Tanto analistas internacionales como las calificadoras de riesgo ven con esperanza las tendencias de las economías de la región. El perfil financiero de los gobiernos parece sostenible. Es decir, pueden endeudarse, la calificación es positiva. Pero, a la larga puede ser negativa si no se utilizan los recursos para invertir en educación, salud, seguridad y protección del medio ambiente. Hay tres datos que parecen sustentar una visión positiva: las exportaciones de todos los países aumentan, lo que sí es una duda es el impacto que tendrán los aranceles de Yanquilandia sobre nosotros; en lo fiscal se ha ralentizado el déficit fiscal, lo que no sabemos es por cuánto tiempo, ante grupos de presión sedientos de seguir saqueando las arcas públicas.

Como se nota en la figura, los aranceles de Trump afectarán a todos, pero introducen una distorsión más fuerte en contra de Costa Rica y Nicaragua, los inversionistas e importadores gringos pueden dejar a un lado a estos dos países ante la satisfacción de sus “hermanos”.
La calificadora Fitch indica que Costa Rica, Guatemala y Dominicana mantienen calificaciones en el rango BB con perspectivas positivas. No olvidar que en las calificaciones de A, es como estar en primera división, con tasas de interés más bajas para la deuda y más rápidos financiamientos. Estar en BB es como estar a media tabla de la segunda división. Después de los tres mencionados arriba, siguen El Salvador y Nicaragua, con B- y B, respectivamente, con perspectivas estables.
Pero, los riesgos externos son latentes. Trump puede envalentonarse con algunos datos de la economía yanqui en el presente semestre. Los ingresos aduaneros se dispararon, llenando las arcas del gobierno. Podría ser ilusorio, estos aranceles fueron el resultado de que empresarios y consumidores quintuplicaron sus importaciones en el primer trimestre, para protegerse de las amenazas arancelarias del gobierno.

Trump, con su estrategia del loco, vive día a día, en cada momento busca algo positivo de que presumir y algo negativo que atribuírselo al resto de seres humanos.

El PIB gringo ha crecido. De un arranque negativo en los primeros tres meses a un crecimiento del 3% en el segundo trimestre. Algo espectacular. Al observar el siguiente gráfico saltan las alarmas. La mejora es por el manejo estadístico ya que es el resultado de una violenta disminución de las importaciones, con el resto de indicadores prácticamente estancados.

Los datos más recientes del empleo y la inflación en Yanquilandia no auguran nada inmejorable para el futuro. El presidente gringo presiona para que los diseñadores de datos conviertan la realidad en fantasía y solamente emitan datos de bonanza y fe por el gobierno MAGA. La realidad es necia. Siempre presenta su dura verdad ante la demagogia de políticos y analistas.
Hay una fuerte confrontación internacional para cambiar el sistema financiero y comercial internacional. No para eliminar la globalización, sueño imposible. Sino para determinar si la globalización seguirá siendo unilateral (control de Yanquilandia, Inglaterra, Israel) o se volverá multilateral (el eje anglosajón-judio, el eje BRICS, y otros centros que puedan surgir).
Las remesas o la cara pordiosera de la región
Mantener el ingreso de remesas, la inversión extranjera y el crédito del FMI-WB es regla para estos países que no viven de sus propias inversiones sino que viven de las remesas, es decir de regalos de capital por emigrantes. Que están riesgo por la expulsión de los migrantes así como mayores controles sobre las remesas. Con la decente excepción de Costa Rica, las remesas son una fuente esencial de ingresos para los países de la región. Las remesas representan entre el 9 y el 26% de su PIB. El impuesto del 1% aprobado por MAGA en julio será una medida de la resistencia de estos países.

Conclusión
La humanidad está llegando a un momento en que se acumulan todos los problemas de las memorias pasadas. Todos tenemos acceso a un consumo vertiginoso, a información estandarizada y masiva, los cambios se acumulan en forma desordenada y caótica. Todos buscamos nuevos rumbos que nos permitan convivir en paz, en convivencia de ideologías adversas, no podemos comprender toda la información acumulada, los hechos vienen y van en forma de zigzag. Solo nos queda la confianza en que lo mejor del humano se imponga sobre lo peor de nuestra especie.
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