Perspectivas Económicas
Sueños…
La interdependencia internacional es imparable
Hay grupos que en el marco mundial están a favor de la globalización, como es de esperar otros grupos similares están en contra de ella y se pronuncian por su aniquilación. ¿Quién tiene la razón? Para analizar las tendencias hay que decir que el mundo es uno y las relaciones entre las naciones y países cada vez se integran más, con ganadores y perdedores en todos los sentidos. La globalización, es decir la interdependencia entre países y personas es el resultado de todo el progreso humano. Los avances de la producción, el intercambio, las finanzas, la cultura y la salud de los humanos han permitido que un solo ser de la creación se adueñe de todo en el planeta y determine que especie de otros animales y plantas tiene que ser preservado o destruido.
El alcance del dominio humano sobre la naturaleza, gracias a la organización social de mercado, permite que los humanos sean la única especie viva que se reproduce sin cesar, adueñándose de todos los ecosistemas sin oposición, lo que llevará a la devastación de la naturaleza y un final triste para los últimos seres humanos que habiten el planeta.
Al finalizar la segunda guerra mundial, la economía internacional inició un proceso acelerado de cambios y transformaciones, mediante los cuales se profundizó la interdependencia entre las economías nacionales y se fortaleció la transformación de la estructura productiva mundial, permitiendo que las decisiones de cada nación dejen de ser cotos cerrados y caigan bajo el peso de grandes organismos transnacionales.
Las relaciones económicas internacionales de cada nación muestran una tendencia discordante. Por una parte las fuerzas y grupos sociales internos tratan de imponer su sello a los vínculos internacionales de la nación, por otra parte los organismos internacionales definen ciertos principios y valores que tratan de homogenizar a escala internacional. Cada país toma un rumbo y alcanza ciertos objetivos nacionales de acuerdo a quien predomine en esta interacción. Sean cuales sean las decisiones internas no pueden detener el proceso de globalización. Únicamente pueden obtener mejores o peores resultados para el bienestar social. El resultado depende de la correlación de fuerzas internas entre progresistas y conservadores; y las relaciones internacionales básicamente entre superpotencias y organismos internacionales rectores.
El imperio de Trump hacia la victoria aplastante o la ruina del sistema
En los últimos tres siglos las primeras décadas tienden a provocar la confrontación entre potencias que buscan una nueva repartición de las zonas de influencia colonial o neocolonial del mundo. En la actualidad Yanquilandia encabezada por Donald Trump se juega una carta escondida, buscando fortalecer la visión de una sola superpotencia que dicte las tendencias comerciales, políticas y militares al resto del mundo. Pero, se encuentra con una resistencia. La India con su fracturada estructura de clases y razas internas se muestra como un productor mundial importante; China se alza como el principal reto en contra de una sola superpotencia; Rusia trata de mostrar su capacidad de restaurar el imperio ruso, aunque solo con tecnología nuclear ofensiva; Israel como la potencia instalada en oriente medio y el sistema financiero mundial con la cualidad de determinar que pueblos y razas pueden sobrevivir o ser aniquiladas, con la cualidad adicional de predominar sobre la cultura de Europa y Yanquilandia; en Europa, las tres potencias tradicionales Alemania, Francia, Inglaterra están paralizadas sin rumbo tras una larga dependencia de Yanquilandia.
Algunos aseguran que Trump está hundiendo la economía internacional con sus aranceles; otros dice que Trump termina de debilitar la economía de Estados Unidos. Lo cierto es que los datos son ambivalentes. El PIB decrece, pero muy levemente, indicando que la economía gringa resiste los cambios drásticos de la administración Trump.

La Reserva Federal nos indica que la actividad económica se mantiene. Que el inicio del año muestra un período de incertidumbre, ninguna variable ha caído sin recuperarse, más bien existe un vaivén de auges y deterioros que marcan un futuro incierto que no se inclina ni hacia la crisis ni hacia el bienestar. El gráfico del PIB anterior muestra un deterioro de la producción, pero en forma mínima un -0,3% La amenaza de aumentos violentos en aranceles provocó que los importadores, de bienes, servicios y materias primas aumentaran drásticamente sus compras en el extranjero para evadir el primer impacto arancelario.
De tal forma que la FED interpreta que las compras finales internas privadas, que excluyen el gasto público, la inversión en inventarios y las exportaciones netas, suelen ofrecer una mejor perspectiva para interpretar el impulso subyacente de la economía. Por lo que no hay alarma pues el dato es consistente con los inicios de año en USA.
El gráfico 2 de la FED nos indica que el gasto de los consumidores ajustado a la inflación fue fuerte durante gran parte del año pasado. Y, aunque disminuyó a principios de 2025, el comportamiento es parecido al de otros años. El gasto de la gente se recuperó en marzo, probablemente como parte de las precauciones para aguantar los primeros días de aranceles altos, que no se llegan a concretar plenamente.

Por supuesto que los analistas, inversionistas y empresarios están tomando precauciones ante la incertidumbre sobre las políticas gubernamentales en general. Pero no son lo predominante. Trump maneja las grandes amenazas sin fundamento como aranceles, conquista de Groenlandia, recuperación del canal de Panamá, ataques militares a las bases del narco mexicano como un telón que esconde las realidades buscadas.
Debilitar a Rusia, establecer nuevas alianzas en medio oriente, no se sabe sí destruir o fortalecer a Irán, no se sabe si seguir respaldando a Israel o debilitarlo someramente.
Estamos en un mundo claro. Los mercados son la esencia del sistema, pero los gobiernos influyen en forma esencial en las tendencias y derrumbes del sistema capitalista. En la actualidad el gobierno central de Yanquilandia y su congreso, tienen una implicación decisiva sobre la actividad económica y la inflación.
Según datos de la economía USA, los minoristas aprovechan y aumentan los precios aún antes de los aranceles, para prever poder seguirse abasteciendo. Lo cual afecta a los consumidores de menores recursos. Por otro lado, los fabricantes ven los riesgos de interrupciones en la cadena de suministro relacionados con los cambios en la política comercial por lo que importan de antemano masivamente, provocando aumento en los costos. Los cambios en la economía real provocados por las políticas económicas del gobierno siguen su camino, solo queda estar atentos como se impondrán sobre los países más débiles como los de Centroamérica.
Centroamérica tendrá un plan o marcha a la deriva
Al final solo tendrán un buen desempeño los países que muestren un mejor liderazgo reconocido por la mayoría, que diseñe estrategias para el crecimiento industrial y de servicios, que apueste por educación de calidad para la inmensa mayoría. Los demás seguirán navegando en la mediocridad.
Ya que, según los asesores económicos, nos dice que “el presidente Trump ha dejado claro que ya no tolerará que otras naciones se aprovechen de nuestra sangre, sudor y lágrimas, ya sea en seguridad nacional o en comercio.” Centroamericanos, aunque no lo creamos el mundo está cambiando y cambiará más.

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