
Independencia y felicidad de la niñez
Sueños…
Es el momento
La gran tarea y un sueño acariciado por lo guatemaltecos es la construcción de una república democrática que avance progresivamente en lo económico, político, social y en la protección de las miles de especies animales y vegetales que pueblan el territorio de este Estado.
Sin embargo, esa gran tarea tiene siglos de estar estancada. Y continuará así muchos siglos más si no surge en esta república un movimiento de unidad estatal, de educación patriótica y de calidad, con seres humanos capaces de satisfacer sus necesidades de salud básicas, y con un sistema de áreas de bosques y naturaleza protegidos.
No es posible hablar de calidad de la educación en abstracto, cuando este país está en los primeros vergonzosos lugares del mundo en analfabetismo, desnutrición infantil, estatura de población promedio baja por la deficiente alimentación y con los peores desempeños escolares.
El Salvador y Guatemala eran los dos territorios más poblados y de mayor producción al finalizar la colonia, Costa Rica era un desconocido lugar perteneciente a la provincia de León. Hoy más de 200 años después Costa Rica es una república próspera, educada, con indicadores ambientales y sociales líderes en el mundo, mientras sus cuatro compañeras de viaje se han quedado rezagadas. Es el momento de despertar y lanzar un nuevo proyecto de Estado, sociedad y naturaleza que permitan ver el futuro con dignidad y esperanza.

Este ranking no se basa en cifras exactas (no había censos económicos precisos), sino en registros coloniales, comercio documentado y estudios históricos. El añil salvadoreño era el único producto claramente competitivo en el mercado internacional. Guatemala tenía una economía más diversa, pero menos enfocada en exportación. El tercer territorio, todos devenidos en países, en aquella lejana época era Belice, que aunque no era parte de las Provincias de la capitanía, tenía una producción valiosa (madera), pero bajo control británico.
Invertir en nutrición: Clave para una Guatemala más productiva
En el momento actual un ente externo, no faltaba más, el Banco Mundial está impulsando un proyecto para combatir la desnutrición en Guatemala. De su éxito puede surgir una experiencia que podría cambiarlo todo. En primer lugar el proyecto busca ubicarse en áreas rurales, las áreas excluidas del desarrollo. Atinadamente el banco dice “Invertir en una buena alimentación desde la primera infancia no solo transforma la vida del niño, también impulsa el futuro del país”. Es un gran sueño, que la población indígena y todos los grupos rurales se integren a un proceso de nutrición, educación y salud que permita tener ciudadanos más fuertes e inteligentes que conduzcan todos los procesos de desarrollo.

Es de conocimiento mundial la indigna situación en Guatemala, el 46% de los niños menores de dos años padecen desnutrición crónica. “Esto significa que casi la mitad de los niños guatemaltecos ve comprometido su futuro físico, cognitivo y económico incluso antes de empezar la escuela”. Y, eso en el muy hipotético caso que ingresen a la escuela. Guatemala encabeza las listas de personas, niños y mujeres principalmente, afectados por desnutrición en todo el mundo.
Cómo superar esta situación, si se dedica un mínimo del 20% del presupuesto nacional para la atención del embarazo y se apoya a la niñez durante sus primeros 10 años de vida. Tiene que ser un esfuerzo consciente de todos los guatemaltecos. Principalmente de los que ocupan cargos públicos.
“Una alimentación adecuada y agua segura mejora las posibilidades de aprendizaje, permanencia escolar y acceso a un empleo digno en la adultez, y son fundamentales para construir un capital humano sano y productivo que impulse el desarrollo de Guatemala.”
El poder de los primeros días de vida
El Banco Mundial, y sectores sociales y de salud del país están tratando de construir este proyecto. Es de lo poco buenos en los últimos 200 años. Se están concentrando en los departamentos más pobres. Lo que ya es una exageración, pues todos están igual. Alta Verapaz, Chiquimula, Huehuetenango, Quiché, San Marcos, Sololá y Totonicapán.
El desenlace es predecible una infancia nutrida, traerá un país con futuro. Un medio ambiente protegido nos dará una nación llena de esperanzas y confianza para los nuevos retos.
De las crisis a la acción
Resolver algunos de los problemas estructurales añejos es esencial para enfrentar el futuro. Ahora que parece que las guerras se trasladan de nuevo a las costas americanas, así como las dudas sobre crisis económicas, políticas y sociales, hay que mejorar las herramientas democráticas para promover un mundo de paz, solidaridad y pluralismo.
En el blog del ya mencionado Banco Mundial Gallina Andronova Vincelette llama a movilizar herramientas para una respuesta rápida y una resiliencia duradera ante las catástrofes que nos amenazan.
Se nos dice que si los países están preparados para actuar con rapidez pueden enfrentar mejor las emergencia provocando mayores probabilidades de mantener funcionando las escuelas, los hospitales, las carreteras y la economía. Siempre con unidad y conscientes de proteger al resto de seres vivos
Los países que están unidos van a generar resiliencia y abordar mejor los efectos de los mayores impactos climáticos, el aumento de los riesgos de pandemia y la profundización de los conflictos que afectan drásticamente las vidas y los medios de subsistencia en todo el mundo.

Menciona el Banco Mundial que las líneas internacionales de pobreza se actualizaron en junio de 2025. Actualmente, las tres líneas de pobreza son: USD 3.00 (pobreza extrema, ingreso bajo), USD 4.20 (ingreso mediano bajo) y USD 8.30 (ingreso mediano alto).
Conclusión insoportable
El desarrollo es un concepto complejo. No tanto por la dificultad de entenderlo, sino por los obstáculos para alcanzarlo. En el mundo existimos cerca de 190 países, de los cuales solamente unos 35 se pueden calificar de desarrollados. ¿Qué es eso tan difícil de alcanzar?, en nuestro caso, en América latina ya tenemos más 200 años de ser llamados países en vías de desarrollo. ¿Cuándo se termina ese camino?, hasta hoy nadie lo sabe.
Existe cierto consenso para definir el desarrollo. Un país desarrollado es aquel país que logra progresar en cuatro grandes áreas del progreso humano: economía eficiente, solidaridad social, respeto a la naturaleza y convivencia democrática. La gran tarea construir caminos de unidad nacional para alcanzarlo.

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