Pacto de Gobernabilidad (Parte 2)
Vocación de Libertad
“Todo parece indicar que al futuro Presidente, además de un Pacto de Gobernabilidad, le tocará acompañarlo de una fuerte dosis de ejercicio plebiscitario y de consulta popular para darle la dosis de fuerza, energía y ejercicio soberano para tratar con las mafias de una forma terminante”.
Termine mi artículo anterior con el párrafo que copie arriba y ahora, para terminar de desarrollar el hilo de las ideas en torno al Pacto de Gobernanza por Guatemala, con lo que busco aportar lineas posibles de acción para que ocupados y no distraídos como están ahora, nuestros futuros gobernantes, junto a guatemaltecos igual, real y verdaderamente preocupados por el futuro, maduremos las consideraciones políticas necesarias para hacer posible esta ruta de trabajo.
Veo al menos cinco grandes componentes conceptuales de una cancha que por tener estos cinco lados, se me antoja un pentágono que habrá de ubicarse como premisas sobre las cuales construir:
Primer premisa: En todo momento y para todo acuerdo, debe tenerse como marco de referencia la vivencia de nuestro Estado de Derecho claramente definido por el marco de nuestra Constitución Política de la Republica. Nada seria mas contradictorio al propósito de un Pacto de Gobernabilidad, que querer hacer a un lado el texto constitucional y las leyes vigentes en el país. Esto igualmente obliga a que todo aquello que en la actualidad este fuera dé este marco de referencia, deba antes ponerse en su debido orden: Elección de los miembros de la Corte Suprema de Justicia por ejemplo.
Segunda premisa: Cero acuerdo con quienes hasta ahora han sido parte de la corrupción imperante en todos los ámbitos claramente identificados y puesta en marcha de mecanismos jurídicos posibles para establecer procesos penales y civiles de ser necesarios para que aplicando el debido proceso se persiga a quienes ya identificados en los diferentes sectores del Estado, de la iniciativa privada, de la sociedad civil y de cuanto sector lo justifique, se proceda a la brevedad del caso. El Colegio de Abogados, la Academia del Derecho y las organizaciones mayas encargadas del ejercicio jurídico en sus comunidades, bien podrían ser aliados en esta gesta nacional.
Tercer premisa: Gabinete del nuevo gobierno que genere máxima certeza para terminar con la impunidad y la incapacidad de gestión. Debe ser presentado antes de la toma de posesión del 14 de enero, con detalle de las credenciales que acrediten a los profesionales escogidos para formar parte del mismo. Será la primer muestras de confianza que evidencie un equipo técnico profesional, con integridad y sustantivas convicciones éticas y morales para el gobierno entrante.
Cuarta premisa: Incorporación de sectores de la sociedad que agreguen valor de representatividad generadora de confianza, credibilidad desde la sociedad civil y en los que se tenga claro reconocimiento de una VERDAD histórica: Guatemala es una sociedad plural y tal cual la definen los Acuerdos de Paz firme y duradera; es una nación multilingüe, multicultural y multiétnica, reunida orgullosamente en una sola nación guatemalteca.
Quinta premisa: Radical compromiso de descentralización y desconcentración en el ejercicio del presupuesto de la nación para generar certezas en el esfuerzo por atender la emergente situación de áreas del país en donde cada día que pasa son muertes reales y seguras por problemas de hambre, desnutrición y falta de servicios de salud básicos y esenciales.
Teniendo este pentágono como premisas de un Pacto de Gobernabilidad, bien vale la pena avanzar en tejer una suerte de urdimbre que nos permita de forma simultanea y sincrónica en lo posible, imaginar las ideas de transformación que apliquen a los diferentes sistemas de entrega de servicios del Estado, sobre todo a los mas necesitados. Parte de esta urdimbre deberían ser fuerzas políticas no aliadas al pacto de corruptos, sectores de nuestra diversidad etnica y cultural ancestral, sectores académico laicos de las diferentes iglesias, sector académico y medios de comunicación independientes – de los que ya quedan pocos por cierto – jovenes de las universidades del país y cuanta organización civil quiera sumarse y que preste algún servicio activo a sociedad.
Seguiré construyendo en torno a las ideas básicas que podamos fijar para concentrar esfuerzos del Pacto de Gobernanza que se logre alcanzar. Cero corrupción, cero impunidad, cero incapacidad en la gestión del estado.
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